𝙏𝙝𝙚 𝙈𝙞𝙨𝙩𝙖𝙠𝙚 (𝙅𝙚𝙛𝙛𝙏𝙖)

𝟒

El rostro de Ta estaba demacrado tenía unas grandes bolsas bajo sus ojos, no había parado de llorar después de hablar con Apo y su cuñado, estos lo consolaron y le brindaron posada en su casa.

Y para el colmo seguía con náuseas y vomito sin contar de los constantes mareos y cansancio que presentaba desde hace días, él sabía perfectamente lo que sucedía, tanto él como Jeff no se habían cuidado la última vez que habían tenido sexo y eso solo podía significar un embarazo.

—Esto es horrible—Dijo mientras bajaba la palanca del inodoro, aún no había alimento para volver el estómago y era aún más doloroso para su garganta y estómago—¿Porque Jeff?, ¿Porque Justo con Gameplay?

Susurro viendo su rostro en el espejo mientras sus lágrimas bajaban por su mejilla mojándola, quería despertar y que todo solo sea un horrible pesadilla o que simplemente todo sea una broma.

Estaba bajando las escaleras cuando escucho varias voces hablando y una de esas voces era la de Jeff, se detuvo a escuchar de aquella nada tranquila discusión entre Apo y su cuñado.

—No deberías estar aquí, no después de lo que le hiciste a Ta, eres un jodido perro Jeff—Dijo Apo mientras lo apuntaba.

—No sabía lo que hacía Apo, ¡Joder!—Bufo llevando sus manos a su cabello—¿Donde esta Ta?

—¿Porque lo buscas después de casi una semana?, Acaso Gameplay no te sabe atender bien, ¿o quieres seguir lastimándolo?

—Ta cariño, Sal por favor bebé déjame hablar contigo—Dijo mientras se acercaba a donde me encontraba, me alejé sigilosamente entrando a mi habitación—Amor.

—Basta Jeff, es mejor que te vayas—Dijo Mile tomando el hombro de este—Apo no te quiere aquí.

—Bien, me iré pero dale esto por favor y dile que me llame—Dije pasándole un gran ramo de flores y un regalo—Nos vemos hermano.

Jeff miró la puerta de la habitación de Ta para retirarse.

Ta sintió sus ojos empezar a dejar salir nuevamente lágrimas, el solo oír la voz de Jeff le dolía y solo podía pensar en la manera que había jugado con él y sus sentimientos, no quería sentirse más triste sabía que podía hacerle daño.

—Ta, ¿Dormiste bien?—Dijo Apo tomando sus manos—Ven te haré un rico desayuno.

—Gracias Apo, pero no tengo mucha hambre de hecho quiero ir a caminar un rato por el parque.

—No puedes irte sin desayunar nada Ta, siéntate te haré un Té y unos panqueques—Ta asintió sabía que Apo no lo dejaría ir sin comer algo antes.

Apo era como un hermano mayor, un hermano que no tuvo puesto el era hijo único, amaba pasar tiempo con Apo, le gustaba oír sus charlas, que lo ayudará a elegir ropa y verlo de manera acaramelada con Mile, siempre soñó con tener un matrimonio así de fuerte.

Incluso creyó tenerlo.

—Apo, ¿Crees que le deje de gustar?—Dije viéndolo.

—Cariño, eres un chico hermoso además tienes muchas cualidades si él no supo valorarte eso lo hace un completo Idiota—Apo lo abrazó mientras besaba su coronilla.

(...)

Jeff se encontraba en su estudio mientras tocaba la guitarra y pensaba en Ta, extrañaba todo de él, su aroma, su piel suave, su sonrisa y su cuerpo a su lado mientras dormían, las cosas con GamePlay no iban mal pero sin embargo Jeff no lo amaba a él, para Jeff el solo fue una calentura del momento.

—Señor Satur, me acaban de informar que el señorito GamePlay quiere que lo acompañe a su cita de las dos en el hospital—Hablo su nueva asistente.

—Perfecto, confírmale mi salida a esa hora—Dijo sin voltear.

Su bebé nacería en unos meses y se encontraba emocionado pero aún le dolía el hecho de no haber cumplido los deseos de su esposo, fue egoísta en pensar solo en el.

Salió de su estudio para ir a casa por GamePlay y llevarlo a su cita de cada mes, era emocionante ver como esa pequeña cosita crecía día a día y para su buena noticia era un hermoso Niño.

(...)

Ta se sentó en aquella banca bajo aquel cerezo mientras veía a los niños correr jugando cada vez que venía con Jeff solo podía imaginar él como se verían corriendo tras un tierno Niño o como era alzado al viento entre los brazos de Jeff.

Su sonrisa se borró cuando vio llegar a Jeff junto a GamePlay al cual ayudó a sentarse pues se vientre hinchado le dificultaba el caminar y el poder sentarse.

Ambos disfrutaban de un helado mientras Jeff sonreía acariciando y dejando pequeños besos en el vientre de su amante, todo ante los ojos de Ta.

Mientras el solo era un espectador de lo que quería ser, él quería un bebé y esperaba con mucha ilusión a que la prueba de sangre que se había realizado saliera positivo y así poder cumplir su sueño.

No le importaba si Jeff estaría a su lado solo le importaría darle todo el amor que él no tuvo cuando era pequeño.