Capítulo 4: Lo nuestro se terminó

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— Matuuuu — Brian lo llama — ¿Puedo pasar? — Le pide.

— Pasá, Bri — Sonríe, abriéndole la puerta.

— Matuuu — Chilla, abrazándolo fuertemente.

— Uy, ¿qué pasó? — Murmura, acariciando su pelo.

— N-nada — Niega el mayor.

Matías comienza a olfatear el ambiente, sintiendo como el aroma a quinotos al whisky se volvía cada vez más fuerte e intenso.

— ¿Estás en tu período de celo? — Consulta.

— S-sí — Aguirre gimotea adolorido.

— ¿Querés uno de mis buzos?

— P-por f-favor — Lloriquea.

— Ya, mi vida, todo va a estar bien —  Lo sienta en la cama, mientras busca una de sus prendas.

El Omega libera su aroma a Mandarina y Caramelo, buscando relajar al Alfa.

— M-mati — Solloza — M-me d-duele m-mucho.

— Ya voy, Bri, ya — Suspira, tomando uno de sus buzos e impregnándolo completamente con su aroma.

— Ahí ta — Sonríe, entregándoselo.

— S-sos el m-mejor — Chilla, olfateando… sintiendo como su Alfa comenzaba a relajarse un poco.

Soule se sienta a un lado de su mejor amigo y lo atrae hacia él en un abrazo, quién automáticamente esconde su cabeza en el cuello del menor.

En la habitación se comenzaban a mezclar ambos aromas: el picor de uno, con el dulzor del otro, formando una perfecta combinación, que relajaría a cualquiera.

— Ponete mi buzo, te va a hacer bien — Acaricia suavemente su espalda.

— T-tengo mucho calor — Lloriquea.

— Bueno, no llores — Lo atrae más hacia él, liberando una gran cantidad de su aroma, impregnando al Alfa con el mismo.

Matías besa la mejilla del mayor, mientras lo sigue acariciando, mientras que el contrario rodea su cintura con sus brazos, buscando acercarlo más hacia él.

— Ya, Bri, ya — Murmura sin dejar de acariciarlo.

— ¿Tan m-mal A-alfa s-soy para q-qué nadie quiera estar c-conmigo? — Lloriquea

— Sos un Alfa increíble, Bri y el que no lo note que se joda

— V-vos decís e-eso porque s-sos m-mi mejor amigo — Suspira.

— No, nene, lo digo porque te amo mucho y tranquilamente podría estar con vos.

El ambiente tranquilo cambia a uno tenso en el momento en el que el Alfa del marplatense ingresa a la habitación.

— ¿Y yo estoy pintado? — Alejo pregunta serio.

Brian le gruñe al sentir que amenazaba el lugar en el que se encontraba.

— Y vos no me gruñas, Alfa de cuarta — Gruñe — Te metiste con MI Omega — Le muestra sus colmillos.

Se notaba que Véliz estaba enojado, su aroma a menta y chocolate amargo se encontraba completamente amargo.

Mientras que Soulé se separa del abrazo con Aguirre, arrugando su nariz, notablemente incómodo.

— Amor, tranquilo — Pide el único Omega en la habitación — Déjame explicarte.

— ¿Ah sí? ¿qué pensás decirme? — Lo mira elevando una ceja — ¿qué no es lo que pienso? ¿Lo qué ví y escuché? — Masculla

Un nido para Agus - Giay x Barco  [ Omegaverse]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora