Chapter Twelve.

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Después ya de unos días, Teodora comenzó desde 0 con Leo.
Obviamente Teodora no podía evitar sus sentimientos por Leo.
Siempre salían a citas como lo hacían cuando tenían 14-15 años, pero todo como amigos, aunque, ambos se morían de ganas de estar juntos, pero sabían que lo mas "más" seria comenzar desde 0.

A los 18 años, Valentina se sentaba en una banca, rememorando una historia que llevaba consigo desde los 12. Su corazón siempre latió por Leo, su mejor amigo de la infancia, pero él solo la veía como una compañera más. Mientras hojeaba su diario de los 13, lleno de confesiones adolescentes y sus anhelos por Leo, Valentina reflexionaba sobre cómo aquellos sentimientos habían marcado su juventud.

Leo, ajeno a las pasiones de Valentina, mantenía una estrecha amistad con Teodora, quien era el verdadero interés romántico de Leo. Aquella compleja red de relaciones juveniles había dejado cicatrices en el corazón de Valentina, pero también la había llevado a crecer y entender las complejidades del amor y la amistad.

En la banca, rodeada de recuerdos, Valentina confrontaba la realidad de su relación con Leo y la persistente amistad entre él y Teodora. Aunque los días de sufrimiento adolescente por un amor no correspondido habían quedado atrás, Valentina estaba decidida a escribir nuevos capítulos en su vida adulta, superando las sombras de un pasado que la definió.

—Ay Leo, si tan solo supieras lo enamorada que estuve de tí, lo que un día fuimos y que de un dia para el otro cambiaste totalmente conmigo.
¿Hubiera sido diferente si fuera otra persona? ¿Por qué de un día al otro cambiaste y dejaste de hablarme? Que loco, está todo escrito aquí, una estupidez de cuando tenía 12 años hasta mis 16, porque me había olvidado de esta cosa jaja.
Siempre estuve enamorada de ti, quizá lo esté o ya no, en verdad.
Mi niña de 12 años se moría por estar contigo y habría echo lo que sea por estar contigo, con tal de haber tenido una relación de aunque sea 2 semanas o menos.

Valentina agarró el diario y se fue directamente a su casa.
Había una hoguera prendida, se acercó hacia esa hoguera y lanzó el diario, luego de ello, se sento a apreciar cómo se quemaba el diario.

—¿Por qué pensé que me haría caso? Si el la prefiere a ella. Yo solo soy una de sus amigas y... El es mi mejor amigo, pero no tiene caso porque su mejor amiga siempre será ella.— Se recostó en el sofa— ella lo tiene hipnotizado mientras yo muero... Desearía ser... Ella.

Valentina solo suspiró mientras volvió a estar sentada mirando a la nada, su mirada se encontraba nula, solo pensaba en las estupideces que habia echo por captar la atencion de Leo, las veces que salió lastimada mientras recordaba todas las veces que se quejaba con Leo.

"He decidido perdonar las veces que sentí que me ignorabas, pero no puedo negar que el rencor persiste. Valoramos la honestidad en nuestra amistad, y me gustaría comprender mejor la brecha entre tus palabras digitales y tus acciones cotidianas.
Quizás, al abrir este diálogo, podamos encontrar una manera de reconciliar nuestras expectativas y realidades, construyendo una amistad más fuerte y auténtica. Aprecio nuestra conexión, y creo que abordar estas inquietudes nos ayudará a ambos a crecer como amigos"

Valentina se encontraba sola en su habitación, sumida en sus pensamientos. Las cicatrices emocionales de sus esfuerzos por captar la atención de Leo resonaban en su mente. Suspiró profundamente, recordando las veces que había salido lastimada en vano.

Mientras estaba sentada, su mirada perdida reflejaba la decepción que sentía. ¿Eran amigos Leo y ella, o solo la utilizaba para obtener información sobre Teodora? La sensación de ser ignorada por él mientras estaba ocupado con Teodora la abrumaba.

Cada queja compartida con Leo parecía caer en oídos sordos, eclipsada por la presencia constante de Teodora en su vida. Valentina, en su soledad, se dio cuenta de la necesidad de liberarse de esta conexión tóxica. Tomó una decisión: era tiempo de recuperar su dignidad y dejar atrás la sombra de Leo y Teodora.

No estoy tan presente Como debería estarlo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora