_ Emma ya, está tarde, tienes que ir a la universidad._ estaba hace unas horas en el gimnasio y ya se hacía tarde, para ir a clases de la universidad. Mamá me hablaba por el teléfono. _ si mamá ya voy saliendo._ dije de mala gana, y colgué.
Mamá y yo hemos tenido una relación un poco particular, ella y yo tenemos un carácter un poco fuerte, le tengo bastante confianza, para contarle qué hago y dónde voy, pero no para decirle cómo me siento, o como para decirle el daño que ella ocasiona y finge no darse de cuenta.
Cuando era pequeña, papá y mamá se divorciaron, y fue un tanto difícil, ya que, ella tuvo que trabajar mucho tiempo para poder, tener una economía estable. A sí que no pudo estar conmigo mucho tiempo, y mi padre jamás tuvo una relación cercana a mi, pues siempre quiso tener un hijo hombre, y le salio mujer cosa que no le agrado mucho, y prefirió nunca tener cercanía conmigo.
Iba llegando ya a clases después de salir del gimnasio, no quedaba muy lejos de la universidad.
_ Hola guapa, estás preciosa hoy._ no necesitaba voltear a ver para saber quién era.
Doy una vuelta sobre mi mis eje, y como siempre con su sonrisa encantadora estaba Peyper, es mi prima, es la persona más importante para mí, nunca me despegó de ella, desde niña hemos sido inseparables, vive al frente de mi casa con mis tíos, nos llevamos muy bien todo lo hacemos juntas, tenemos una relación demasiado bonita.
Estaba preciosa con un vestido negro hasta sus muslos, sus botas hasta la rodilla y su cabello perfectamente peinado corto, labios rositas.
Tiene el cuerpo más bello que avía visto, íbamos a la misma universidad, solo que ella estudia fotografía, y yo estudio arte._ Hola bonita, igual que tú._ le di un fuerte abrazo y una sincera, sonrisa, era de las sonrisas que solo le daba a ella y a Sam, que se estaba acercando con una sonrisa.
_Hooolaaa, qué guapas están._ dijo Sam con su sonrisa.
Samanta y yo hemos sido amigas desde siempre y por ello Peyper, Sam y yo éramos muy inseparables, solo que pey y yo éramos más unidas.
_ Dios Emma ¿dónde as comprado ese vestido? Estás muy bella, ¿para dónde vas?._ lo dijo entre cerrando los ojos. Me revisé e iba con un vestido de cuero, unas botas, una chamarra ancha, no vi que me viera bien como lo decía.
_ No seas exagerada Sam, chicas no es por no querer seguir hablando, pero Sam vamos chica, tenemos clase._ Sam y yo estudiamos la misma carrera._, nos vemos más tarde pey._ nos fuimos alejando, y le mandamos un beso.
Fui a clases y como siempre, fue un poco estresante y agotador, pues estábamos en épocas de parciales, y miles de proyectos por los cuales entregar, salí del salón dando por terminado, y nos dirigimos con Sam a la cafetería a comer algo. Después de un largo tiempo nos reunimos todas en el aparcamiento, dónde se encontraba el auto de Sam. Nos subimos y cantábamos las canciones de Billie Eilish, a todo pulmón.
Llegué a casa y me sumergí en mi soledad un largo tiempo. Estaba tan sola en esa casa tan grande que decidí ir a ver qué hacía Peyper. Salí de casa y fui directo a la suya, toque la puerta, y no tuve que esperar mucho, para que ella fuera la que abriera la puerta, con una linda sonrisa.
_ Bonita, te tengo que contar algo _ pase por su lado entusiasmado._ cómo ya sabes, a mí me invitan a todo lo que haya fuera de la universidad._ era cierto, todo el mundo me invitaba a todo lado, Sam decía que era por qué, querían que yo fuera sus amigos, cosa que nunca le tomaba importancia._ y me han invitado, a una fiesta de un chico llamado Adrián, no sé quién es, pero quiero ir, y tú y Sam van conmigo._ lo dije con una gran sonrisa.
_ Emma no quiero, estoy cansada._ lo dijo con una voz muy cansada. Cosa que no me importa porque sabía que la fingía.
_ No seas hacía pey, nos vamos a divertir, a demás estoy creyendo que no quiere ir por tu aburrido novio._ le di una mirada de reproche.
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Volver a coincidir
ContoNunca pense en el suicidio, hata que estuve en esa posición; en el borde de la terraza mas grande de la cuidad, apunto de tirarme y por fin sentir alivio total. Emma, una chica que desde pequeña ha tratado de sobrellevar la ausencia de sus padres, a...