Una Victoria Cadmeana -COMPLETO-

Capítulo 93: Deseos perfectos como ese

Descargo de responsabilidad: nada es mío; todo es de J K Rowling.

Me temo que es más corto, este vuelve a la longitud normal, pero el último fue más largo, por lo que no está tan mal.

Capítulo 93

'No deberías estar en algún lado?' Katie preguntó, sentada en la otra mitad del sofá, Harry estaba tumbado, poniendo alegremente sus piernas sobre sus tobillos cuando no retiró los pies a la mitad del asiento.

'Sí', Harry asintió, 'Supongo que debería.'

'Último conjunto de exámenes en Hogwarts', se burló de celebrado.

'Habré completado mis NEWT antes que tú', Harry le sacó la lengua a su hijo, 'y los escritos ya salieron bien, las pociones prácticas eran buenas.'

'Dijiste que el papel de pociones era duro', le recordó Katie, cambiando su peso, y Harry hizo una mueca mientras sus caderas se movían contra sus espinillas.

'Fue,' admitió, 'pero en general está bien.'

'También tienes una licencia de aparición', se rió. 'Ahora se te permite aparecer por todas partes como tú.'

'Saca toda la diversión', estuvo de acuerdo Harry, sacando los pies de debajo de Katie.

'Vas entonces?' Preguntó en voz baja, la alegría se desvaneció.

'No hasta fin de año', le aseguró Harry. 'Son sólo unos pocos meses.'

No hasta que tenga la piedra de la resurrección, corrigió en silencio.

'Bueno,' ella sonrió, 'nos iremos juntos.'

'Qué vas a hacer cuando te vayas?' Preguntó harry, frunciendo el ceño. Katie nunca había mencionado sus planes futuros.

'No estoy seguro', se encogió de hombros. 'Tengo algunas pruebas con equipos de quidditch, pero nadie enorme, y los resultados de mi examen son lo suficientemente buenos como para aplicar a la mayoría de los lugares, entonces, si mi quidditch no funciona, supongo que buscaré algo que se vea bien y funcione allí.'

'Estoy seguro de que funcionará', sonrió Harry, 'especialmente con una escoba tan buena para jugar.'

Katie parpadeó con gratitud y lo persiguió hasta el borde de la entrada a la sala común, agachándose a través de la pintura detrás de él. 'Neville se va con Hannah', le dijo, 'pero me pidió que te deseara buena suerte.' Tenía que hablar en voz alta, porque entre sus dos caras, la dama vestida de satén que actuaba como guardiana de la torre de Gryffindor cantaba sorprendentemente tristemente.

'No lo necesitaré', sonrió Harry, ignorando el retrato.

'Hush' Katie hizo pucheros, 'no tientes al destino.' Ella le dio un abrazo rápido, apretándolo con fuerza. 'Buena suerte', sonrió, 'no pongas un cuervo gigante en todos los que están cerca esta vez.'

'Lo haré todo lo posible', prometió Harry, riéndose.

Sus exámenes se llevaban a cabo en el aula en la que normalmente tenía Transfiguración, y donde actuó como conejillo de indias para la investigación de McGonagall; estaba a pocos pasos de la Torre Gryffindor.

La puerta crujió cuando la abrió, y los ocupantes de la habitación se volvieron para mirarlo uno tras otro. Dumbledore, McGonagall cuyo aula estaban usando, el Profesor Tofty, a quien recordó de los exámenes de los últimos años, y un Profesor Slughorn de aspecto tímido.

'Harry', el director sonrió. 'Me temo que tendrás un poco de audiencia. La profesora McGonagall decidió quedarse, y como esta es su habitación, no pude encontrarla en mí para rechazarla. El profesor Slughorn me asegura que dejó su clase de quinto año bajo supervisión para venir a ver, aunque no me di cuenta de que estaba tomando un examen de pociones.'