*ೃ࿔ Magical Christmas

彡☆ 04: Un beso Inesperado

Jungkook decidió ir al parque, y aceptar la cita. Decidió darle una oportunidad a Jimin, y ver qué pasaba. Se vistió con ropa casual, pero elegante, en cuál consistía en un pantalón negro, camisa de cuello alto negro y un abrigo del mismo color, se había puesto una cadena en su cuello como último accesorio.

Se peinó el cabello, y se perfumó el cuello. Se miró al espejo, y se sintió nervioso, pero emocionado. Salió de su departamento, y tomó un taxi. Le dijo al conductor que lo llevara al parque, donde lo esperaba Jimin.

Jimin estaba sentado en una banca, bajo un árbol. Llevaba una chaqueta roja, y un gorro blanco. Tenía una expresión ansiosa, y miraba su celular. Esperaba que Jungkook le respondiera el mensaje, y que viniera al parque. Esperaba que aceptara la cita, y que le diera una oportunidad. Se sentía nervioso, pero emocionado. Miró el reloj, y vio que eran las 6:05. Se preguntó si Jungkook llegaría, o si lo dejaría plantado.

Pero entonces, vio a Jungkook caminar hacia él. Lo reconoció por su cabello negro, y sus ojos oscuros. Lo vio más guapo que nunca, con su ropa casual, pero elegante. Lo vio sonreír, y sintió que su corazón se aceleraba. Se levantó de la banca, y fue a su encuentro.

- Hola, Jungkook. - Lo saludó con una voz dulce y amable. - Me alegra que hayas venido.

- Hola, Jimin. - Le respondió con una voz temblorosa. - Yo también me alegro.

- ¿Te gustó el pastelito? - Le preguntó Jimin, con curiosidad.

- Sí, me gustó mucho. - Le dijo Jungkook, con sinceridad. - Gracias por el regalo.

- De nada, Jungkook. Es un placer. - Le dijo Jimin, sonriendo. - ¿Y qué tal te sientes?

- Me siento bien. Me siento feliz. - Le confesó Jungkook, sonrojándose. - Gracias a ti.

- No hay de qué, Jungkook. Me alegro de que te sientas feliz. - Le dijo Jimin, acercándose a él. - ¿Sabes? El pastelito que te di tiene un poder especial. Puede cumplir el deseo de encontrar el amor.

- ¿En serio? - Preguntó Jungkook, sorprendido.

- Sí, en serio. - Afirmó Jimin, mirándolo a los ojos. - Y yo sé cuál es tu deseo.

- ¿Ah, sí? ¿Y cuál es? - Preguntó Jungkook, intrigado.

- Tu deseo es el mismo que el mío. - Le dijo Jimin, acortando la distancia entre ellos. - Tu deseo es estar conmigo.

- ¿Cómo lo sabes? - Preguntó Jungkook, sintiendo el aliento de Jimin en su cara.

- Lo sé porque lo siento. Lo siento en mi corazón. - Le dijo Jimin, rozando sus labios con los de Jungkook. - Y tú también lo sientes, ¿verdad?

- Sí, lo siento. - Admitió Jungkook, cerrando los ojos. - Lo siento mucho.

- Entonces, no lo pienses más. - Le dijo Jimin, besándolo con pasión. - Solo déjate llevar.

Jungkook se dejó llevar, y correspondió el beso con igual pasión. Se abrazaron, y se fundieron en uno. Se olvidaron del mundo, y solo se concentraron en el momento. Se sintieron felices, y completos. Se sintieron enamorados, y correspondidos.

Habían encontrado el amor, y se habían hecho un regalo.

Un regalo inesperado, pero maravilloso.