Percy Jackson: Un Nuevo Semi-Dios.

Capítulo 4

Ya había pasado una semana desde que llegué al campamento Mestizo y donde comencé a vivir con los hijos de Hermes, he de admitir que son buenos chicos y creo que Luke y yo somos los únicos mayores en el campamento o en la cabaña.

A pesar de lo que se vea por fuera, la cabaña de Hermes en el interior es inmensa y eso es quedarse bastante corto a como es en el interior, creo que se debe a que como los campistas llegan al campamento sin ser reconocidos por sus padres y madres se quedan en la cabaña de Hermes.

Annabeth me ha estado enseñando griego antiguo, me dijo que posiblemente me podría ayudar y tuve que evitar preguntar para que cojones eso me iba ayudar porque si preguntaba ella me iba a meter una biblia entera que no quiero saber.

Ella me dijo que su madre es Atenea, jamás la vio en persona pero si en sueño, algunas veces la diosa de la sabiduría se le presentaba en forma de lechuza que es su animal sagrado. Me tente en decirle que eso era esquizofrenia pero no le dije nada.

Por cierto, descubrí en esta semana que doy asco en las actividades comunes como alzar la bandera del campamento, limpiar la basura del suelo y de alimentar a los perros de Artemisa.

En serio, ¡¿como mierda puedo ser tan malo en eso?!

Lo único bueno que puedo decir de todo esto, si es que es bueno, las ninfas y nayades se volvieron muy cariñosas conmigo y me regalaban desde flores, peces, corales e incluso se ofrecieron a darme un Hipocampo bebé y un cachorro de lobo.

Decir que me avergonzaba estas cosas era poco, jamás ninguna chica me regalaba cosas solo mi madre lo hacía pero supongo que puedo agradecer por estas cosas además no tengo el valor de decir no a esto.

Luke me informo que hoy en la noche es la batalla de capturar la bandera me explico de lo que trata y lo que consiste, tomar la bandera del enemigo y llevarla rápidamente a la base para poder ganar. Suena fácil pero luego recorde la cabaña de Ares quienes me la tenían jurada.

No creo poder salir de eso.

- Ahhhh -bosteze, eran las 10 de la mañana y la actividad de ahora según Luke era practicar con la espada.

- Hombre -un campista se rio- creo que Luke te va a dejar humillado -comento riéndose.

- Supongo -dije por esto, jamás practique con la espada pero creo poder apañarmelas.

Los campistas llegaron, debíamos entrenar para alguna misión que probablemente jamás llegue pero debemos prepararnos por si las dudas, Luke es un buen amigo y siento que es como el hermano que perdí algo que me pone triste pero estoy realmente feliz de tenerlo.

Luke llegó agitado, al parecer estaba haciendo algo. En sus manos estaban dos espadas.

- La lección de hoy -me entrego la espada y por extraño que parezca pude sentir una extraña corriente en ella- es el desarme, ¿quieres que te enseñe?

Asenti ante esto, los campistas de nuestro alrededor algunos veian esto y los otros hacían lo suyo como pelear en una especia de batalla con espadas y otros refinaban sus habilidades con la misma.

Luke comenzó a indicarme como hacer el desarme, estuvimos chocando las espadas hasta que de pronto el hijo de Hermes uso la espada para chocar contra la mia con mucha fuerza y luego uso el mango del arma pegando contra mi muñeca lo que me hizo soltar la espada y quejarme del dolor.

- Bien, tu turno. -me entrego de nuevo mi espada, asenti a lo que el dijo y puse ambas manos sujetando el arma.

Luke se puso en posición, inspire y exhale en mi interior varias veces, se que no tengo experiencia alguna en el uso de las espadas pero mi cuerpo parecía que quería batallar. Luke me ataco, bloquee su ataque y le di una patada en el pecho que le sacó el aire, por lo que me aproxime rápidamente a él atacandolo con fuerza y rápidamente el comenzó a bloquear todos mis golpes.