El fanfic "La niñera" cuenta la historia de Bill Kaulitz, quien fue diagnosticado con esquizofrenia a los 12 años. Debido a su trastorno, Bill se comporta como un niño pequeño asustado, pero poco a poco comienza a ganar confianza gracias a T/n, la p...
La expectación en la casa de t/n era palpable. Las luces centelleaban, la mesa estaba decorada con elegancia y el espíritu navideño llenaba el ambiente. Bill, con los ojos brillando de emoción, esperaba impaciente el inicio de una Navidad diferente junto a t/n.
Las amigas de t/n, Jimena, Nicole y Snooki, llegaron con alegría. Snooki, acompañada de Tom, quien no entendía mucho sobre la Navidad pero irradiaba felicidad al ver a Bill. La cena prometía ser un festín, con la cocina de t/n desplegando sus mejores creaciones.
La mesa se llenó de risas y conversaciones animadas mientras disfrutaban de la exquisita cena. La entrada de palta rellena, el pollo al horno con puré de papas y el decadente mousse de chocolate fueron un deleite para el paladar.
Llegó la hora de los regalos, y el árbol brillaba con luces parpadeantes. Los ojos de Bill y Tom se iluminaron aún más al descubrir los montones de regalos envueltos con esmero. Cada paquete contenía una muestra de cariño y pensamiento para hacer especial la noche.
La casa resonaba con risas y exclamaciones de alegría mientras desenvolvían los regalos. Bill, rodeado de amor y afecto, descubría la magia de la Navidad de una manera nueva.
Al dar las doce campanadas, el calor de la celebración llenó el espacio, marcando una noche mágica que quedará grabada en los corazones de todos. Juntos, compartieron momentos que fortalecieron los lazos de amistad y familia, creando recuerdos inolvidables en esta primera Navidad de Bill junto a t/n. Los risueños destellos de la decoración navideña parecían bailar en la mirada agradecida de Bill. T/n, rodeada de amigos y del sonido de risas contagiosas, sentía en su corazón que aquella noche iba más allá de regalos y luces brillantes; era la construcción de un nuevo capítulo, un comienzo lleno de amor y esperanza. Y así, entre abrazos y buenos deseos, la magia de esa noche especial dejó su huella imborrable en los corazones de todos.
Después de la apertura de regalos, la sala se llenó con risas y exclamaciones de alegría. Bill, con ojos iluminados, descubría cada sorpresa con una fascinación infantil. T/n observaba con ternura, agradecida de ver la felicidad en su rostro.
Jimena, Nicole y Snooki compartían historias alegres mientras disfrutaban de la compañía y la comida deliciosa que t/n había preparado con tanto cariño. Tom y Bill, con sus juguetes nuevos, se sumaban a la animada escena, creando un ambiente festivo y cálido.
La noche avanzaba, pero el espíritu navideño permanecía fuerte. A medida que las risas se mezclaban con la música suave de villancicos, t/n reflexionaba sobre la belleza de tener a Bill en su vida y sobre cómo estas simples alegrías compartidas construían la base de su pequeña familia.
Finalmente, con gratitud en sus corazones, decidieron dar un paseo bajo las estrellas, disfrutando de la serenidad de la noche y reflexionando sobre el significado más profundo de la temporada navideña: amor, compasión y la alegría de compartir momentos especiales con aquellos que más apreciamos.
Así, en esa noche mágica, las luces destellantes del árbol de Navidad parecían reflejar la luminosidad de los lazos creados, prometiendo que esta sería solo la primera de muchas navidades compartidas en el cálido abrazo de la familia que habían formado. Bajo el cielo estrellado, t/n se detuvo por un momento, abrazando a Bill con un cariño que no necesitaba palabras. Las luces titilantes de la ciudad se reflejaban en sus ojos, que brillaban con una mezcla de felicidad y superación. Había algo profundamente conmovedor en ver a Bill experimentar su primera Navidad real, lejos de las sombras de su pasado.
Bill, sintiéndose seguro y amado, apretó suavemente la mano de t/n. En ese gesto simple, se podía percibir la confianza que había construido y el entendimiento mutuo que compartían. Las risas de los demás, las luces destellantes y la suave brisa de la noche creaban un escenario mágico, pero lo más especial era el calor que emanaba de sus corazones unidos.
En el paseo tranquilo, t/n notó que Bill miraba el cielo con una expresión pensativa. Entonces, él le preguntó con su tono infantil pero lleno de curiosidad, "¿Crees que las estrellas están felices hoy?".
T/n sonrió y le respondió con suavidad, "Sí, Bill, creo que las estrellas están muy felices. Y yo también lo estoy, porque estás aquí conmigo".
Fue un momento simple, pero en esa conexión especial, ambos sintieron que estaban construyendo algo más grande que una familia. Estaban construyendo un refugio de amor y aceptación, donde las cicatrices del pasado no importaban y el presente estaba lleno de promesas de un futuro más brillante.
Así, con el susurro de la brisa y el eco de risas alegres, t/n y Bill continuaron su paseo, sumidos en la magia de una noche que simbolizaba no solo la celebración de una temporada, sino el comienzo de una nueva vida llena de amor y esperanza. El suave murmullo de la brisa y el eco de risas alegres crearon una sinfonía mágica mientras t/n y Bill continuaban su paseo. La noche, impregnada de la esencia de la Navidad, no solo marcaba la celebración de una temporada, sino el inicio de una nueva vida colmada de amor y esperanza. En cada paso, se forjaba una historia llena de momentos preciosos que formarían las páginas de su inolvidable viaje juntos.
Después de asegurarse de que Bill y Tom estuvieran profundamente dormidos en el cálido refugio del cuarto, t/n, Nicole, Snooki y Jimena se reunieron en la terraza de la casa para celebrar esta especial Nochebuena. La brisa nocturna acariciaba sus rostros mientras se preparaban para disfrutar de una variada selección de bebidas festivas.
La mesa estaba adornada con colores y luces centelleantes, reflejando el espíritu alegre de la temporada. Botellas de cola de mono, rompope, ponche, clericot, champagne, vino blanco con piña, Glühwein, canelazo, agua de Valencia, crema de vie y otras delicias esperaban ser destapadas.
Al sonido de los brindis y risas, compartieron historias y risueñas anécdotas. Mientras las copas se alzaban, la magia de la Navidad envolvía la terraza con una luz especial. Los destellos de las velas y las risas resonaban en la tranquila noche, creando un ambiente mágico que solo la unión de buenas amistades puede brindar.
Las risas continuaron, las copas se llenaron y vaciaron en un vaivén de emociones festivas. La terraza se convirtió en un rincón donde la amistad y la complicidad se celebraban con cada sorbo y carcajada. Mientras tanto, las luces de Navidad titilaban en armonía con la risa y las conversaciones animadas.
De vuelta en el interior de la casa, Bill y Tom dormían plácidamente, completamente ajeno al jolgorio que ocurría afuera. Para t/n y sus amigas, esta Nochebuena se convirtió en un recuerdo especial, una paleta de colores y sonrisas que adornaban su corazón con la promesa de futuras celebraciones y amistades que perdurarían en el tiempo.
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Nota: Queridas lectoras,
Quiero expresar mi más sincera disculpa por la demora en la publicación del último capítulo. En las últimas semanas, me encontré inmersa en el desafiante período de exámenes para ingresar a la universidad. Esta etapa demandó toda mi atención y energía, impidiéndome dedicar el tiempo necesario a la escritura.
Sin embargo, estoy emocionada de informarles que ahora, con los exámenes superados, regreso con renovado entusiasmo y compromiso para continuar la historia que todas ustedes han seguido con tanto interés. Agradezco profundamente su paciencia y apoyo.
Estoy ansiosa por compartir los próximos capítulos y ver hacia dónde nos llevará esta travesía literaria. Gracias por su comprensión y por ser parte de esta aventura.
