Colegio

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La semana de la fiesta de Jungkook había pasado dando inicio a la semana de colegio, se alistaba para ir a su escuela y recibir clases o al menos el primer día se vería con que compañeros le tocó.

Se organizarian y se presentarían para conocerse mejor, aunque en el futuro dejaría de lado a algunos de su compañeros.

Bajo al comedor, vio una nota en el referígerador de su madre diciendo que dejó el desayuno y el almuerzo para que calentará y comiera, su madre había salido a la media noche por trabajo.

Dejó la nota a un lado, tomó su desayuno con algunas tostadas, cepillo sus dientes una vez terminó de desayunar, tomó una manzana para comer después y salió rumbo a su instituto.

Llegó a la parada de bus y espero a que este llegara, se subió y bajo en la estación para tomar el metro que lo dejara cerca de su colegio.

A lo lejos vio al tailandes y se acercó a él rodeando su brazo por los hombres de su amigo.

-Jungkook-. Dijo sacando sus audífonos.

-BamBam-. Le sonrío. -¿Yugyeom no está contigo?-. Logró preguntar.

-Irá con su madre-. Respondió guardando su teléfono en su bolsillo. -¿Has usado el regalo que te di?-. Jungkook asintió.

-Si-. Vio como llegaba el metro y espero a que este abriera las puertas para subir. -Ilumina todo el techo-. Le informó y BamBam sonrío viendo que su regalo cumplía su función correctamente. El presente consistía de una lámpara que al encenderla dibujaba constelación dando un imagen demasiado entretenida y relajada.

-Me alegra que te guste-. Dijo y se sentaron en unos asientos vacíos. Jungkook ya no se sentía incómodo cuando se encontraba con BamBam, ahora que lo conocía podían viajar juntos y conversar desde la estación hasta el colegio, se sentía ameno, el tailandes hablaba hasta por los codos y él lo escuchaba, en algunas ocasiones aportaban unas cuantas palabras para seguir con su camino.

Llegaron al colegio veían como algunos eran nuevos y otros ya eran conocidos.

Sentados en las gradas del patio esperando a que los maestros les digan que se formarán para ingresar.

Yugyeom había llegado hace unos minutos, abrazaba a BamBam disfrutando de los pocos minutos que les quedaba.

-Voy al baño-. Dijo tomando su bolso, sin esperar respuesta se fue a paso normal. Se preguntaba a que hora llegaría Taehyung, aunque el castaño no se lleve con el par lo esperaba con ansias.

-Hola, Kook-. La voz dulce de Rose se interpuso en sus oídos y la presencia de ella se interpuso en su camino.

-Hola-. Dijo sonriendo. -¿Estas sola?-. Preguntó y ella asintió.

-Lisa vendrá con Taehyung, así que me vine-. Jungkook detuvo sus pasos sintiendo su pecho apretarse.

-Oh-. Fue lo único que dijo. Ya no quería estar ahí, quería ir a casa y dormir. -¿Me esperas? Tengo que ir al baño-. Le dijo a la rubia y esta asintió. Jungkook entró al baño, de hecho no tenía ganas de hacer nada, solo quería despejar su mente, pero fue su destino final cuando escucho lo del castaño. Suspiró pensando en el. ¿Acaso no le había dicho que se tomaron un tiempo? ¿Qué pasó?

Mordió su labio, ¿Por qué se había enamorado de él? ¿Por qué no podía quitar esos sentimientos? ¿Por qué no veía que tenía pareja y era una de sus amigas? Sacudió su cabeza, no se quería perturbar con eso, se supone que hoy era un día de disfrutar la escuela porque era el primero.

Salió del baño, camino junto con Rose en silencio, ambos eran introvertidos, no tenían tema de conversación.

Cuando llegó al patio vio a Taehyung y a Lisa juntos, Rose lo llevó de la mano con ellos aún si Jungkook se quería negar solo se dejó ser, algo dentro de si, lo incitó a ir allá.

Dos amigos, dos traidores  ▪Tk▪.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora