Shameless [Nicholas x Ej] Nichojoo

05: Candyman

── No sé porqué lo sigues cuidando. Él es un hombre hecho y derecho ──

Escuchó la voz de Harua. También era estudiante de medicina sólo que iba en el primer año. El chico conocía a Euijoo porque cuando vino de Japón se hospedó cerca de la casa de los Byun y se hicieron muy amigos desde ese entonces.

── No necesita de ti ──

Ej asintió.

── No me necesita, tienes razón. Pero yo quiero cuidarlo ──

── Me contaste que te trató feo, ¿por qué sigues aferrado a él? Según tú ni siquiera te gusta ──

── Porque él esconde cosas. Sé que algo pasó que por eso fue así conmigo... Algo que todavía no ha querido contarme ──

── Tu preocupación es demasiado genuina, ¿estás seguro de que no te gusta, ni siquiera un poco? ──

── Él no... Me gusta. No me gusta ──dijo más para convencerse a sí mismo que al menor.── Sólo quiero ayudarlo, supongo. Él no es un mal tipo ──

Harua suspiró.

── Está bien, pero ten cuidado ──

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Nicholas cerró la puerta detrás suyo luego de entrar, y dejó su bolso en uno de los asientos para ir a la cocina a por agua.

── ¡Oh! Has llegado ──murmuró Juju volteando a verlo.

El menor parecía hacer un par de resúmenes en la isla de la cocina.

── ¿Estudiando para algo, ricitos? ──

── Sí. Mañana tengo un examen. Pero ya estoy a nada de acabar ──respondió para luego posar su mirada en el rubio.── Tú, ¿cómo te sientes? ──

── Estoy bien. He seguido al pie de la letra tus indicaciones así que me estoy recuperando bastante rápido ──

El menor orgulloso sonrió y dejó que el contrario jugase con uno de los rizos de su cabello.

Sin embargo una llamada entrante rompió la burbujita en la que estaban y pronto el rostro del mayor se transformó.

Serio, frío y mordaz.

── Te escucho ──murmuró al celular, con la voz raspante.

Ej lo miró todo el tiempo. Seguramente la persona del otro lado de la línea ponía a Nicholas demasiado tenso, porque hasta una vena parecía querer reventar en su cuello.

── Estaré allí en un hora ──

Sin más colgó y enojado guardó su teléfono.

── ¿A dónde irás? ──le preguntó sin poder evitarlo.

── Asuntos familiares ──respondió crudo. No queriendo dar más información acerca de.

── Aún estás bajo reposo, Nicholas. Así que ten cuidado ──

Le recordó.

── Lo sé. Pero aún así, debo ir. Sino el problema será mayor ──

Byun frunció el ceño.