★ ° :. 彡𝐒 𝐓 𝐈 𝐓 𝐂 𝐇 𝐄 𝐒★ ° . * ☆𝙹𝙴𝙽𝙻𝙸𝚂𝙰☆

☆ cap. 6 ☆

Pov Lisa:

Miraba el cielo obscuro de la ciudad mientras Jungkook conducía de vuelta a casa. Tenía una cosa llamada, "bloqueo emocional".
Desde esa noche en la que intenté suicidarme, mis emociones se volvieron algo desconocido para mí, era como si hubiera puesto un candado en ellas y no siquiera yo tenía la llave.
No podía sentir nada.

Pero éste momento, ese instante en el que mis pies tocaron el gimnasio, ese instante en el que mis ojos vieron aquel ring el cual conocía a la perfección de pies a cabeza, en el cual me había subido infinidad de veces. En el instante en el que ví aquel mundo de nuevo, sentí como los recuerdos mi invadían y mi corazón saltaba de alegría. Aquello era lo que más me llegó a apasionar alguna vez.

Suspiré sin dejar de ver el paisaje nocturno, dejando vapor en la ventanilla del coche.

— Parece que estás muy distraída — Habló Jungkook — ¿No te gustó volver ahí verdad?, debí suponerlo, soy un tonto. Lo siento mucho si te abrumó todo esto — Se disculpó preocupado.

—¡No no!, no es eso — Me apresuré a decir — Es solo que... Me trajo muchos recuerdos y... Tal vez no estaba lista para volver pero, me gustó — Suspiré — fue lindo recordar viejos tiempos — Sonreí tristemente mirándolo.

— Me alegra que te haya gustado, yo supuse que te gustaría — Me sonrió cálidamente.

El resto del camino fue silencioso, Jungkook no dijo nada ni yo tampoco, pues no sabía exactamente qué decir. A demás, a mi cabeza se sumaba otro problema. Jennie.

Ella me vió en ese lugar y si se lo contaba a mi padre, mi vida se acabaría en ese preciso momento.
En el momento menos esperado, ya estábamos en la entrada de la casa de mi padre.

- Llegamos - Avisó Jungkook estacionando su auto enfrente de mi casa - Fue una linda noche Lisa. Te extrañé - Dijo tranquilamente apagando el motor de su auto.

- Me divertí Kook. Gracias por seguir siendo mi amigo después de todo - Le sonreí dándole un beso en la mejilla - Nos vemos otro día ¿Vale? - Le dije para después salir del coche y dirigirme a la puerta.

Él sonrió tímidamente, encendiendo el auto de nuevo y arrancando. Yo saqué las llaves de mi bolsillo y pude ver como la cortina de la ventana se movía levemente, como si alguien estuviera observando momentos antes, pero decidí no darle importancia.

Abrí la puerta y me encontré con la obscuridad abrazadora de siempre. Las luces no estaban encendidas, indicando que no había nadie en casa. Suspiré, esto me recordaba tanto a mi adolescencia y gran parte de mi infancia.

Caminé hacia la cocina y encendí las luces, caminé hacia el refrigerador y tomé una botella de agua. Miré hacia la barra y había una pequeña nota amarilla encima de ella que decía: Lisa, Chae Rin y yo salimos a arreglar algunos asuntos en la empresa que surgieron de último momento, llegaremos hasta el lunes. No me dió tiempo de esperarte para decírtelo. Regresaremos pronto y pasaremos muchos momentos en familia, ¿Te parece?... No puedo esperar para recuperar este tiempo perdido, ¿Entiendes?.
Te quiero hija, volveremos pronto. Cuida de Jennie y llevala a sus clases de baile el sábado ¿Bueno?
Nos vemos pronto Lisa. Con cariño, papá.

Leí la nota en voz baja y bufé un tanto molesta. Cómo siempre, mi padre estaba demasiado ocupado como para avisarme con una llamada o algo así. Rodé los ojos tirando lejos aquella nota.

Había dos cosas buenas que podía sacar de todo esto. La primera era que al menos Jennie no le había comentado nada a mi padre de que estaba en el gimnasio viendo aquella pelea clandestina. La segunda era que tenía tiempo a solas para poder ir a la cita con mi psiquiatra Jihyo, la cual era el sábado.