🦋⃟

463 63 14
                                    

Ad: Esta parte contiene escenas sexuales muy explicitas, considerarlo antes de leer, no todo es sexo, hay trama, siempre se puede saltar la parte sexual si incómoda. Es un tipo de contenido no tan sensua, sino un poco, morboso, por así decirlo, no es a lo que estoy acostumbrada, así que, puede estar raro.

En esa Navidad de 1996 Harry tenía mucho en mente, entre el misterioso príncipe mestizo, el asunto de su sospecha de que Severus ayudaba a Malfoy, los hombres lobos y tantas cosas en general, su cabeza dolía. Ese día se había ido a dormir frustrado porque una vez más se topó con un callejón sin salida en averiguar la identidad de aquel que le ayudó a mejorar en la asignatura de pociones.

Como siempre que se quedaba en la madriguera, Harry durmió en la cama de Ron, la casa de los Weasley se hallaba a rebosar, como una lata de sardinas aplastadas con salsa de tomate. Si bien tuvieron el detalle de armarle una cama plegable, prefirió recostarse junto a su amigo, le reconfortaba esa sensación cálida que surgía cada que se acurrucaba en el pecho de Ron.

A diferencia de Harry, Ron se había dormido apenas se recostó en la cama. Se quedó dormido poco después de que Ron lo abrazara por la espalda entre sueños, quizá esa era la cosa que más le agradaba de su amigo, siempre estaba a su lado y le apoyaba en los momentos complejos, en cada una de sus noches de insomnio—en las que pensaba demasiado en las situaciones difíciles y les buscaba un sentido— trataba de estar despierto con él hasta que su cuerpo se desplomara por el cansancio.

Esa noche tuvo sus regulares pesadillas, soñaba con niños que gritaban y sombras extrañas. Se removió de forma incómoda en la cama.

Unos suaves labios conocidos lo despertaron al posarse sobre los suyos, una suave presión que le trajo de vuelta del mundo de las pesadillas, lo primero que vio ese día fue la mirada llena de amor y cuidado de su amigo.

— Fue un sueño Harry—dijo Ron, mientras se inclinaba a darle otro pico.

Volvió a cerrar los ojos para pedir en silencio recibir otro beso, le gustaba como sus labios hormigueaban cada que Ron lo besaba con tanto cariño. O el cómo acariciaba sus mejillas con mimo y atraía su rostro hasta que sus rostros quedaban a pocos centímetros el uno del otro.

— Dios, estoy... ¿qué hora es? —preguntó Harry.

— Las tres de la mañana—respondió Ron, mientras le daba otro beso rápido.

Harry se sentó en la cama para poder darle un beso real a Ron, una manía que tenía su amigo y le encantaba era que le gustaba succionar su labio inferior hasta dejarle con las piernas como fideos.

— ¿Te desperté? —preguntó Harry una vez se alejó.

— No, llegó Pig con una carta...

— ¿Una carta?

— Parece una de esas cursis tarjetas de navidad que venden en el supermercado —sonrió Ron—, pero no la he abierto.

— A ver...quiero verla.

Sin vacilar Ron se la entregó, se acostó a su lado mientras miraba su perfil tan hipnotizado. Harry vio la carta y a primera vista se dio cuenta de que era una carta de amor con temática navideña.

— ¿Quién la envió? —preguntó con los labios apretados.

— No la leí todavía.

Apenas la abrió, notó que la enviaba Lavander Brown, una chica que estaba enamorada de Ron y no hacía nada por ocultarlo, lo observaba en los pasillos y a veces trataba de forzar conversaciones.

— Es de Lavander—expuso Harry.

— Ah, vaya...

Ron tomó la carta para leerla, quizá por respeto a Lavander no dejo que Harry la leyera también. A medida que avanzaba en su lectura, la expresión de su rostro se tornaba complicada, como si le plantearan algo a lo que no puede responder.

𝐁𝐥𝐮𝐞 𝐛𝐢𝐫𝐝 𝐚𝐧𝐝 𝐩𝐞𝐭𝐚𝐥𝐬 【ronarry】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora