Chapter 6: "Dynasty".

940 87 31
                                    

28 de mayo, año 2023.
Bangkok, Tailandia.
6:36 AM.

Al momento de cerrar sus ojos los recuerdos de la tarde anterior golpearon fuertemente en su mente. La calidez, suavidad y delicadeza de los labios ajenos le hacían sentir un leve hormigueo en la punta de los dedos. Suspiró, y lanzó agua fría a su rostro en un intento de espabilarse. Se secó con cuidado y se observó fijamente en el espejo frente a él. Sabía que debía ser sumamente cuidadoso a partir de hoy, pues había tocado un terreno completamente peligroso y era consciente de que si no procedía con cautela las cosas podían irse a la mierda en un segundo. Tenía que controlar sus impulsos y evitar que lo sucedido volviera a repetirse, por mucho que realmente deseara el contacto ajeno.

Asintió para sí mismo y procedió a salir del baño.

Gemini tenía sus objetivos muy claros, y no dejaría que un adolescente nublara sus pensamientos.

Tomó su teléfono en silencio y marcó un número que se sabía de memoria, al derecho y al revés.

—Buenos días. —Murmuró, una vez que la llamada fue aceptada.

Buen día, ¿a qué debo el honor? —cuestionó una voz masculina al otro lado del auricular.

—Voy a necesitar que alistes uno de mis coches para una carrera este viernes. —Comentó, caminando hasta su armario, comenzando a buscar un traje para su día de trabajo.

Uhm, ¿qué carrera? —cuestionó el otro hombre.

—La que vas a organizar para mí, Christopher. —Respondió sereno. —Y quiero que prepares el Skyline, en ese voy a correr. Pasaré mañana para asegurarme yo mismo de que todo está en orden.

El mencionado suspiró del otro lado de la línea.

Bien, voy a moverme para que todo esté listo a tiempo. —Murmuró.

—De acuerdo, y asegúrate que esta vez no haya cerdos arruinándonos la diversión. —Literalmente advirtió.

El otro rió.

No me hagas recordarte que me hiciste meter sus narices en esto porque querías quedar como un héroe, Vek. —Sonrió para sí mismo.

—Cierra la boca, ese fue un mal necesario. Esta vez quiero que todo sea como siempre. —Ordenó, finalmente decidiéndose por un atuendo.

Está bien, te llamaré más tarde para organizar detalles, hasta luego. —Se despidió el joven.

—Adiós, Chris.

Gemini colgó la llamada y una de sus comisuras se alzó lentamente.

———————MINE———————


Se sentía avergonzado.

Fourth estaba genuinamente apenado con lo sucedido la tarde anterior, y por ello mismo se había rehusado a dejar sus aposentos, pues sabía que al hacerlo tendría que estar cara a cara con su jefe de seguridad, y ciertamente, era a la última persona que deseaba ver en ese momento.

La vergüenza calentó sus mejillas cuando los recuerdos de lo sucedido volvieron a su mente. Él gimoteando y tirando de las hebras ajenas como un pobre imbécil necesitado de contacto. No se había podido reconocer a sí mismo, y mucho menos controlar sus hormonas. Ni siquiera estaba seguro de cómo es que las cosas llegaron a su fin, pero, estaba plenamente consiente de que aún sentía sus cálidos labios sobre los suyos, lo cual le generaba escalofríos.

Cerró los ojos y se escondió bajo las sábanas, sabía que ya pasaba del medio día, pero aún no tenía el hambre suficiente como para abandonar su fuerte, y mucho menos ganas de pedir el desayuno a la cama, pues aquello implicaría salir al pasillo y buscar a algún sirviente, y estaba enterado de que por órdenes de su padre Gemini se convertiría básicamente en su sombra, así que sí, evitaría salir de su habitación a toda costa.

MINE [Geminifourth] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora