Rᴇɴᴜɴᴄɪᴀ ᴀ Rᴇᴄᴏɴᴏᴄᴇʀᴍᴇ ♡ ℤ𝕒𝔻𝕣/ℤ𝕒𝔻𝕗 ♡

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— ¿y eso? ¿Dónde lo guardabas? No lo vi la última vez que revisé

— ¿la última vez que revisaste? — preguntó el irken mirando con claro desconcierto al humano, quien solo tragó saliva al darse cuenta de lo que había dicho, ambos callaron en un silencio incómodo, para luego simplemente volver a trabajar.

Las horas transcurrieron y eventualmente Dib decidió que ya era hora de irse a dormir y como ahora dormía en el sillón de Zim, subió a la planta alta y tal como lo había hecho la noche anterior, sacó las mantas que había empacado y se acostó, desplazando finalmente a Gir del sofá, quien ahora se encontraba echado a sus pies abrazando un patito de hule.

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Era al rededor de las 2 de la madrugada cuando un sonido que parecía inundar toda la base, lo despertó. Gir aún se hallaba "dormido" en sus piernas y no parecía inmutarse por lo ruidos que allí se escuchaban, Dib se quedó un rato acostado observando el techo y esperando que el sonido cesara por sí solo, pero una vez se dio cuenta de que eso no pasaría, decidió levantarse.

Moviendo pesadamente al robot dormido a sus pies y aún estando en calcetines y calzoncillos, decidió tomar el elevador y descender a la planta inferior, el sonido viajaba atravez de los tubos y era obvio que todo venía del laboratorio bajo la casa. Una vez las puertas del ascensor se abrieron, lo primero que vio fue como todo nuevamente estaba a oscuras exceptuando un par de luces tenues que a duras penas iluminaban algunas partes de la habitación, barriendo con su mirada el lugar, encontró a Zim. El irken, quien llevaba puesta su polera de pijama, se hallaba suspendido en el aire y con sus patas mecánicas clavadas en la pared, estaba con la mitad del cuerpo metido en el ducto de ventilación, mismo cual había sido roto por la turbina hacia no muchas horas atrás.

Al no poder distinguir bien al alien, Dib se acercó a los interruptores de la luz y los encendió todos, sobresaltando al irken y logrando que saliera del conducto

— ¡¿Qué haces?! — preguntó alzando la voz por la distancia, mirando a Zim, para luego voltear a ver al ascensor, cual había vuelto a subir

— ¡TRATO DE ARREGLAR ESTA COSA! — replicó el irken con clara frustración en su voz

— ¡SÍ ya me di cuenta! ¡pero, ¿por qué a esta hora?! — cuestionó, volteando nuevamente a ver al elevador y notando como Gir bajaba de el

— ¡PORQUE NO LO SOPORTO MÁS! — contestó descendiendo ligeramente y mirando de reojo al humano

— no soportas más ¿qué, exactamente? — habló nuevamente pero está vez caminando hacia el contrario para dejar de gritar

— ¡EL FRÍO! ¡YA NO LO SOPORTO!

— ¿Qué pasó con tu chaqueta? — preguntó Dib medio cambiando el tema y acercándose aún más siendo seguido por Gir