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-Que nos duelan los labios de tanto besarnos, los brazos de tanto abrazarnos, que nos duela la mente de tanto pensarnos y el corazón de tanto querernos

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-Que nos duelan los labios de tanto besarnos, los brazos de tanto abrazarnos, que nos duela la mente de tanto pensarnos y el corazón de tanto querernos.-

Aquí esta

Enfrente de mí

Mirándome

Sin parecer creer que yo también estoy enfrente de él

Siento que no estoy respirando
o más bien que se me ha olvidado.

¿Estoy despierto realmente?

-Zenitsu...-Da un paso hacia mí y yo retrocedo otro.

Suena tan real que no puede ser un sueño

Siento el frío, huelo la humedad del ambiente que indica que pronto va a llover otra vez, siento como la emoción despierta empezando a correr por mis venas y algo en mi cabeza me pide que salte encima de y lo abrace como si se fuese a acabar el mundo en un segundo.

-Tanjiro....-Mi voz no suena segura en lo absoluto.

Tengo miedo

Tengo algo en el estómago que me indica una vez más que esto es real.

-¿Eres tú?-Pregunto sintiendo que si ahora despierto voy a llorar como nunca antes

-Sí soy yo-Dice con una voz tan segura que no lo pienso más y avanzó dejando todos mis miedos atrás. Cuando estamos solo a unos centímetros lo abrazo con fuerza y siento como  el corresponde con la misma intensidad.

Sintiendo como algo dentro de mí pecho se rompen en pedazos y comienzo a llorar contra el hueco de su cuello, aferrándome a él, sintiendo que si lo suelto va a volver a desaparecer como la niebla con el aire.

-Lo siento-Dice el

-No te disculpes idiota....-Digo como puedo, alejándome un poco de él para hacer que nuestras miradas se encuentren

¿Cómo podría culpar lo de lo que pasó?

¿cómo el puede culparse por lo que pasó?

¿por lo que ha vivido?

¿Por algo a lo que no ha tenido elección a elegir?

Por algo que a él también le ha dolido.

Su mirada no se desvía de la mía y yo tampoco la apartó de la suya y entonces pasa ese chispazo donde nuestros labios se buscan y se encuentra como si no tuvieran otra selección más que besarse, más que robarse el aire hasta que ambos necesitamos tomar un poco más, sus manos tiran de mi cintura y me pegan a su cuerpo, yo aprieto su ropa al sentir una de las mariposas revolotear por mi estómago.

Se ha vuelto más alto que yo o soy yo que quizás no he crecido nada, su pelo también se ve un poco más largo y rojizo, su cara también ha cambiado un poco, siento que sus manos ocupan más en mi cuerpo que cuando éramos adolescentes...En pocas palabras se ve como todo un adulto.

Amor y MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora