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—Saber que somos tan distintos y aun así estar una vida juntos—
-¡Tanjiro!-Grito entre risas Zenitsu.
Estaban entrenando nuevamente cuerpo a cuerpo y Tanjiro estaba aprovechando su ventaja para hacerle cosquillas mientras el otro se revolcaba por el suelo sin poder detenerlo.
Zenitsu no entendía como siempre acababan así, en vez de entrar jugando al gato y al ratón.
-No podrías enfadarte, solo estoy jugando.
-Acosta de mi sufrimiento.
-te estabas riendo
-¡Mentira!
-Verdad
-¡Estoy sufriendo!
Tanjiro después de un ratito más molestándolo y zarandeándolo juguetonamente para todos lados. Dio por terminado el entrenamiento cuando estuvo satisfecho y le dijo que iban a ir a un sitio.
-¿Dónde?
-Al bar del otro día
-¿Miu tiene algo más que contarte?
-No. Han venido unos contrabandistas que trabajan con mi padre y por lo visto quieren decirnos algo. Yo iba a hablar con ellos esta mañana cuando te has ido a trabajar, pero se han tenido que ir antes de que yo llegara porque mi madre ha mandado a algunos de los suyos a reventar algunas de sus bodegas.
-¿A ellos no les habían atacado antes?
-No. No se atrevían o algo así no, estamos muy seguros quizás ahora tengan otro tipo de armas más letales
-Todas las armas son letales
-Pero no es lo mismo atacar con pistolas que atacar con granadas o metralletas.
-Point for you
En el camino Tanjiro le explicó que las personas con las que iban a hablar eran un poco idiotas. Exageradamente idiotas. Que seguramente intentarían burlarse un poco de él pero que no se preocupase que realmente no eran tan malos como parecían.
Zenitsu se había mentalizado con lo que se iba a encontrar...Pero no se esperaba que se viesen como personas tan normales era como ver a Jonny Depp y Brad Pitt sentados en frente de él pero con ropas de chavales de la calle y un porro.
J y H les había llamado el.
-¿Con que tú eres el tirador del que nos ha hablado Miu?-H
-Eh, sí-Respondió Zenitsu tratando de no parecer un pequeño ratón.
