Capitulo 5: El amor de la bruja

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Todavía no podía creerlo, la situación era demasiado surrealista, en las historias que siempre leía, era una regla establecida que el convocado a un nuevo mundo siempre tendría habilidades poderosas o una suerte sin igual, cuando Subaru llegó a este mundo se sintió completamente engañado, era débil como ninguno y su suerte no podría ser peor, después de ser arrastrado a esta fortaleza llena de asesinos profesionales y conocer a madre, este se había resignado a creer que todo lo que había leído era una vil mentira, no estaba aquí para ser un héroe, estaba en ese lugar para ser un esclavo, sin poder alguno, o al menos eso pensaba hasta hace unos minutos.

''¿Que clase de requisito de activación tan tétrico es este? ni siquiera se si puedo controlar el punto de guardado, además, ¿tendré intentos limitados? ¿si muero un numero de veces especifica muero definitivamente? ¡maldición! ¿Porque tengo tan poca información?''

El chico murmuraba para si mismo con una mirada pensativa, su habilidad no podía describirse de otra forma más que desagradable, el hecho de morir para activarse era una enorme bandera roja para Subaru, después de pensarlo durante un tiempo, el chico solo pudo suspirar de cansancio.

''Bueno no todo este mal con [el regreso por la muerte] al menos me permite retener mis recuerdos del bucle pasado, además si no fuera por ella ya habría muerto de verdad''

Mientras reflexionaba en silencio, una persona entró a la enfermería, una familiar cabellera pelirroja fue lo que vio el chico, Rista había regresado, ahora con el uniforme de mayordomo de Subaru en la mano, además de un vaso con agua, la sirvienta se acerco. a la camilla donde se encontraba sentado el chico.

''Ten subaru-san, aquí esta tu uniforme, tienes tus medidas exactas, ya se te fueron tomadas mientras estabas inconsciente y además te traje esto''

Rista le ofreció el vaso con agua al chico, dándole las gracias lo tomo y le dio un largo trago, sin dudas el agua fría lo ayudaría a pensar mejor las cosas, luego de acabarse el vaso, rápidamente lo coloco sobre la mesa que se encontraba al lado de la camilla, Subaru miraba a Rista fijamente, ver el ojo intacto de la sirvienta provoco en el chico variadas emociones, culpa y alivio las principales, sentía una inmensa culpa, ya que en el anterior bucle, fue por ayudarlo a el que la pobre chica sufrió tal castigo, se había prometido que la protegería y lo único que hiso fue lastimarla, algo que solo acrecentó el autodesprecio que sentía Subaru, pero a la ves sentía un enorme alivio, a pesar de todas los horribles sucesos que pasaron, ellos ahora no existían y la chica estaba perfectamente bien, a pesar de todo, aunque ella no lo recuerde, Subaru si lo hacia y nunca olvidaría los pecados que cometió.

'' Bueno, creo que ya te sientes mejor subaru-san, deberíamos ir a la cocina ahora''

Subaru se tenso visiblemente, la cocina era un lugar donde sucesos nada agradables habían, sucedido principalmente por culpa del propio chico, talvez si buscaba otro enfoque para tratar la situación podría salir impune de esta, '' al menos ahora se que mencionar a Basil en presencia de meili esta totalmente descartado, ¿que debería hacer para que me ayude?'' Subaru forzaba a su cerebro a trabajar en una solución rápida al pandemónium que se avecinaba sobre el, mientras caminaba por los pasillos con Rista guiando el camino, el chico miro la espalda de la sirvienta,'' definitivamente de ayudare'' un susurro inaudible había salido de Subaru mientras se aproximaban a la cocina.

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'' ¿Me mando a llamar madre?''

En una silenciosa y oscura sala del trono, se encontraban dos figuras, una arrodillada frente a la otra que se encontraba sentada en un hermoso trono dorado, la mencionada Madre solo ladeo la cabeza, en su rostro se veía una sonrisa, algo que no auguraba nada bueno.

iniciando mi vida desde cero como un asesino a sueldoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora