Capítulo 3: Sin Pistas.

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*Capítulo 3: Sin pistas*

Oscuridad... 

Humedad...

Calor...

Ira...

Resentimiento.

Hambre...

Mucha hambre...

Odio...

Sangre...

Todo estaba en penumbras, el goteo constante de... ¿Agua? Hacia las cosas más... Inquietante, yo estaba seguro que tenía miedo... Pero... No estaba sintiendo mis emociones...

—Falta... Muy.... Poco... — Eso que había salido de mi boca... No era mi voz, no estaba seguro que fuera siquiera Español... Pero lo había entendido

—Muy... Poco... —

-¿Encontraste algo sobre el mito de la serpiente? - Adolfo me trajo a la realidad.

Había estado perdido en mis pensamientos desde que me levanté, había tenido un sueño muy raro y eso ya de por sí era extraño, ¿por qué? Porque nunca recuerdo que sueño, o sea, casi pareciera que no lo hago, pero eso es imposible, todas las personas sueñan y aparte me he parado varias veces por pesadillas, pero jamás recuerdo el contenido de estas, pero esta mañana, aunque tampoco recuerdo de que se trataba, recuerdo... Sensaciones... Sentimientos y estos me había estado molestado hasta ahora.

-¿Eh? Sí - Respondí fijándome en él, habíamos llegado temprano a la escuela y ahora estábamos esperando que tocarán el timbre, de nuestro grupo solo estábamos los otros dos por el momento - Apenas llegue, busque por Internet y le pregunté a una vecina que sabe mucho del pueblo - Me estire, aun la pesadez de la mañana no se me quitaba. -¿Y tú encontraste algo? -

- La verdad, no mucho, parece como si casi nadie conociera del tema. - Respondió

-Sí, de eso me di cuenta, es como si solo supieran las cosas de manera superficial. -

- Exacto, En Internet apenas y se habla del tema y casi todo el mundo solo sabe que el mito dice que hay una serpiente de siete cabezas y una de ellas está debajo de la iglesia. - Explicó, yo asentí, más o menos ese era el conocimiento público.

-Estamos hablando de un mito venezolano, no hay modo de que hubiese sido fácil- Un bostezo se me escapó mientras mi mirada se perdía un poco en el ajetreo de la llegada de los demás alumnos.

Pero sin saberlo volví a divagar, aún estaba en mi mente la sensación de odio con la cual me había levantado, tanto fue mi periodo fuera que cuando el timbre sonó me sobresalte.

-¿Aún estás con sueño? - Pregunto/Saludo Gabriel, quien terminaba de llegar, lo cual era muy raro, él casi nunca llegaba tan temprano.

- Ehhh... Sí, un poco, tuve un sueño raro y me quede despierto desde muy temprano. - Le respondí, él había pasado su brazo por sobre mis hombros.

-¡Uhhh! ¿Un sueño húmedo? - Bromeó mientras subía y bajaba las cejas.

-Naaah ¡Ojalá! Lo mío fue más como una pesadilla - Ambos caminamos, así como estábamos junto a Adolfo, a donde todos se estaban formando para hacer la formación para el acto cívico. -Pero eso no importa mucho ¿Encontraste algo sobre la serpiente? -

- ¡No Chico! Lo mismo que habíamos visto ayer en la casa de Maira y el mito clásico de que una de las cabezas está abajo de la iglesia. - Respondió soltandome y quedándose detrás de mí en la formación.

La "Realidad": El Misterio De La Serpiente De 7 CabezasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora