We fell in love in October ︱ᴏᴍᴇɢᴀᴠᴇʀsᴇ

✧*. Capítulo VI

✩‧₊° Pequeñas cosas ༉‧₊˚.

Harry dió un último vistazo en el espejo antes de bajar a la cocina. Amaba arreglarse antes de irse al colegio, el rimel, el rubor y brillo en sus labios nunca faltaban.
Sus rizos estaban bien sujetados por una bandana color rojo, tan sólo habían unos mechones cayendo por su frente, pero nada que le molestara.

Bajó las escaleras hasta la cocina y se topó con Louis desayunando. Sabía que sus padres habían ido temprano a trabajar, tenían que estar en un evento muy importante para la empresa.

Saludó al alfa y fue a buscar su desayuno para luego sentarse al lado de Louis.

──¿Pudiste dormir bien? ──cuestiona Louis, observando al omega. Por supuesto que durmió bien, de maravilla, le sorprendió bastante que luego de hablar con el alfa haya podido conciliar el sueño.

──Ujum, dormí bastante bien. ¿Y tú? ──era su turno de preguntar, sonrió de lado cuando Louis asintió. Se tomó un poco de tiempo en observar a Louis, tenía el cabello desordenado, pero le gustaba. Tenía los labios finos, pero carnosos y su tono de piel era bronceado. Hermoso, pensó Harry.

──Sí, dormí bien, pero como te dije, amanecí con ojeras ──se quejó, rodando los ojos──. Por cierto, ¿podrías ayudarme a tapar las ojeras como me dijiste anoche? Por favor ──pidió, Harry no se podía negar y tampoco quería hacerlo.

──Claro, cuando termine mi desayuno iré a buscar el maquillaje para tapar tus ojeras ──sonrió, más para sí mismo que para el alfa.

Su desayuno se basó en pequeñas pláticas, algunas miraditas y sonrojos por parte de Harry cuando Louis se daba cuenta que lo miraba. Tan sólo eran miradas por el rabillo del ojo, pero el alfa siempre se daba cuenta de la mirada de aquel omega que tenía al lado, era simplemente inevitable no mirarlo también.

Louis suspiró cuando el aroma de Harry se hizo más presente en su nariz, se sentía bien cuando ese delicioso y dulce aroma a lavanda era percatado por sus fosas nasales.

Harry se levantó de su lugar y le dijo a Louis que lo esperara que iría a buscar el maquillaje en su habitación. Cuando volvió, Louis estaba en la misma posición sentado en la silla, viendo hacia la escalera. Harry se rió cuando lo vió, parecía un perrito esperando a su dueño.

Se colocó en frente del alfa e hizo que levantara un poco su cabeza, tenía suerte de tener un corrector de ojeras del tono de Louis. El alfa era un poco más alto que Harry, por esa razón es el que lo dejó ahí sentado.

Mientras Harry tapaba sus ojeras, Louis se mantuvo mirando el cabello rizado del omega, amaba tanto ese hermoso cabello.
Harry finalmente terminó con su trabajo, aun así, no se alejaba del alfa. Se quedó ahí mirando sus ojos, estos estaban más azules que antes, eran como un océano, un hermoso océano. No sabe si fue su imaginación o tal vez ocurrió de verdad, pero vió a Louis bajar su mirada a sus labios y luego volver a ver los ojos de Harry.

Pasó su lengua por sus labios, su respiración era un poco más pesada, podía sentir el aliento de Louis pegándole en la cara. Todo eso hizo que Harry perdiera el equilibrio y se tambaleara antes de que Louis lo sujetara por la cintura, su agarre era firme pero tímido, como si en algún momento él apartara su mano de ahí.

Ahora era su turno de mirar hacia los labios del alfa, deseaba tanto probarlos y descubrir a qué sabían, se sonrojó cuando Louis hundió sus dedos en su cintura, mentiría si dijera que no le gustaba sentir el agarre del alfa en su cintura.