El resplandor dorado del amanecer se filtraba a través de las cortinas entreabiertas, pintando la habitación con tonos cálidos y suaves. Observé el nuevo día asomar, un espectáculo que en circunstancias normales habría disfrutado plenamente, pero la extraña realidad en la que me encontraba eclipsaba mi capacidad de apreciar la belleza del amanecer. Justo cuando mis pensamientos se perdían en la incertidumbre, un golpe resonó en la puerta, rompiendo el silencio de la mañana.
"Adelante", dije con una mezcla de curiosidad y ansiedad. La puerta se abrió con suavidad, revelando la figura de Dovey en la entrada. "Sigues despierta, querida", pronunció con su voz calmada y una expresión de preocupación apenas perceptible en su rostro.
Asentí levemente, sintiendo el peso de la falta de sueño en mis ojos. "No podía dormir", confesé, mis palabras llevando consigo la carga de las horas de insomnio. Dovey avanzó hacia mí con pasos serenos, su presencia llenando la habitación con un aire reconfortante.
"¿Es algo habitual para ti o es por todo esto?" preguntó Dovey, indicando con un gesto sutil el entorno desconocido que nos rodeaba. Sus ojos examinaban mi rostro en busca de respuestas, como si pudiera encontrar la clave de mi situación en las líneas de cansancio que comenzaban a formarse bajo mis ojos.
"No...no es habitual", admití, sintiendo la necesidad de compartir un poco de mi vida anterior. "Solía dormir temprano. Tengo un trabajo agotador y además las clases consumían toda mi energía", expliqué mientras recordaba las largas jornadas laborales y las noches dedicadas al estudio. Era extraño cómo, en medio de la extrañeza aun así necesitaba quien me escuchara, Dovey se acercó a la ventana y la luz del amanecer iluminó su perfil. Mis pensamientos se agitaron en una mezcla de esperanza y aprensión. Mientras miraba por la ventana hacia el amanecer, me preguntaba cómo sería mi vida en este nuevo mundo, pero eso jamás ocurriría debía irme a mi casa.
Observé cómo el sol continuaba ascendiendo en el cielo, pintando el horizonte con tonalidades doradas y rosadas que daban vida al paisaje fuera de la ventana. La luz del nuevo día se filtraba en la habitación, iluminando los rincones antes oscuros. La conversación con Dovey sobre mi falta de sueño y la adaptación a este nuevo mundo quedó suspendida por un momento, eclipsada por la incertidumbre que surgía de las palabras que había escuchado del director anteriormente.
"Bueno, debo volver a casa... dime, ¿lograste averiguar algo?" cambié de tema, sintiendo la necesidad de retomar el control de la conversación. Dovey asintió con una expresión comprensiva, como si entendiera que, en medio de la maraña de magia y desconcierto, necesitaba algún rastro de normalidad.
"Sí, por supuesto. Vamos, la clase comenzó temprano, así que debemos irnos de inmediato", respondió Dovey mientras se dirigía hacia la puerta. La seguí fuera de mi habitación, sumergiéndome nuevamente en los pasillos mágicos de la escuela encantada. A medida que caminábamos, la atmósfera parecía impregnada de una energía única, como si cada rincón del lugar estuviera cargado de secretos y misterios por descubrir.
Llegamos al patio, y me sorprendió ver a los mismos estudiantes que había encontrado el día anterior, sentados en pupitres que parecían dispuestos de la misma manera precisa. El eco de la conversación de ayer resonó en mi mente, y me pregunté qué papel desempeñaba cada uno de ellos en este elaborado plan para regresarme a casa.
Mientras observaba el sol continuar ascendiendo en el cielo, la incertidumbre y la maraña de pensamientos seguían tejiendo su red en mi mente. Intenté apartar esos pensamientos al ver que Dovey se preparaba para partir. "Bueno, debo volver a casa... dime, ¿lograste averiguar algo?" cambié de tema, deseando concentrarme en algo más concreto.
"Sí, por supuesto. Vamos, la clase comenzó temprano, así que debemos irnos de inmediato", respondió Dovey con una sonrisa tranquilizadora. La seguí fuera de mi habitación, y juntas atravesamos los pasillos de la escuela encantada. Cada rincón parecía respirar magia, y la sensación de estar atrapada en un cuento de hadas se intensificaba con cada paso. Al llegar al patio, noté que los mismos estudiantes que había visto el día anterior estaban sentados en sus pupitres, dispuestos de manera idéntica. La escena me resultó extrañamente igual, como si estuviera reviviendo una versión repetida del mismo día. Dovey, con su determinación habitual, se dirigió a los estudiantes con un aire de autoridad. "Entonces... princesas, debemos repetir todo como ocurrió ayer por la mañana. Y bueno, despidámonos de nuestra querida viajera, porque esperamos que esto la lleve a casa", anunció, marcando el inicio de un evento que aún no entendía del todo.
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°Tiempos Entrelazados° Lady Lesso x Lectora
FanfictionUna joven, anhelando escapar de la monotonía de su vida cotidiana, se ve envuelta en un misterioso portal creado por un libro encantado. Transportada a un mundo fantástico, conoce allí a una mujer de belleza sobrenatural. Mientras explora este reino...