Real Gone! {Aaron Mitchell & Lectora} Finalizada

# 01: Nueva actualización de Pal

No...: Fueron sus únicos pensamientos durante una fracción de tres minutos completos en el instante que se derrumbó dolorosamente. Sus manos soltaron las de su madre. No deseaba soltarla. Pero... estaba sudando llena de miedo. Había soltado a su madre... los robots se la habían llevado & nunca pudo decir ni una sola disculpa por sus formas de comportarse.

Necesitaba hacer una cosa; pensó... intentando levantarse cuando una persona caminando hacia atrás choco contra ella. Solo su miedo los haría encontrarse, observándose con sorpresa.

—¿(t/n)...? — Aaron pregunto con sorpresa & felicidad de encontrar a la chica que tanto le atraía en un sitio como este. Era un horrible momento para sentir mariposas en su estómago, así como oía el coro de los ángeles cuando sus ojos se centraron en solamente ella.

Y el caos al fondo.

—Ven con nosotros.

¿Cómo se siente... ser así de hermosa? Pensaría Aaron con un suspiro cuando la observaba sentada en el autobús. Sus cabellos se mecían con el viento que entraba a través de la ventana. Centrada en su propio mundo al escuchar música con sus fieles audífonos. La misma clase de rutina desde que se mudó a la ciudad. Y aun así... solo habían entablado unas pocas conversaciones antes de que Aaron terminase huyendo del sitio como un cobarde que la haría preguntarse si había un problema.

Sus mundos eran diferentes.

Pero esa historia él no la conocía. No. Aaron solo sabía exactamente lo mismo que el resto: Que ella siempre se desvanecía en sus propias ideas. Escribiendo en clase un mundo misterioso. Escuchando & soñando con la historia de las canciones. Si... ellos solo sabían una buena parte de ella. Pero cuando el autobús se detenía en su residencia ella se bajaba con una expresión cansada como estresada en tener que quitarse los audífonos para enfrentarse a la realidad de la vida.

Porque (t/n); odiaba tan solo respirar.

Porque su vida familiar era completamente lo opuesto a la de Aaron. No era un ambiente feliz. Sino... todo lo contrario. Y ella solo ansiaba encerrarse en su cuarto con tal de sentir que podría vivir en otro mundo al encender su computadora de escritorio.

—Nos vemos (t/n)...

Diría Aaron con un pequeño rubor en su rostro con ciertas esperanzas de no ser oido. Solo... despedirse de ella. Mucho más cuando iniciaban las vacaciones de verano. Y no la vería hasta el próximo año escolar.

—Ten unas buenas vacaciones, Aaron.

Su sonrisa lo era todo; su corazón latiría como loco cuando la vio sonreírle antes de descender el autobús. Oh no. Cada vez que observaría su sonrisa sentiría que se enamoraba cada vez más profundamente de ella. Anhelando un día... no ser tan cobarde para tener más conversaciones sin salir corriendo, quería hacerla reír... quería que... ella sonriese a su lado para compartir sus intereses en común.

Solo ansiaba eso...

Pero no la conocía del todo ni conocía como su sonrisa se tornaría en nada cuando entraba a casa. Avanzando a toda velocidad en la dirección de su habitación. Subiéndole todo el volumen a su música mientras su madre se apresuraba en alcanzarla con tal de tener más de una conversación al sostener el teléfono móvil de casa entre sus manos.

Extendiéndolo hacia su dirección.

Palabras incomprendidas debido a la música.

—¿Qué? — preguntaría cuando la música se desvaneció al quitarse los audífonos de mala gana. Observando a su madre que estaba cansada y aun así tenía un brillo amoroso por su única hija.