CAPÍTULO 8

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INTRUSOS Y ALGIEN MÁS

Los hombres de kamski entraron de manera sigilosa apuntando a los lados, eran algunos 5 o 6 podría a cavar con ellos de manera rápida.

-Tengan cuidado hay trampas y seguro que ella está aquí-

-¿Quien?-

-La chica que quiere el jefe si la encuentran la quiere viva-

Asique me quiere con vida eh, pues es una lástima porque no me tendrá ni en su funeral.

-Y si la quiere a ella ¿para qué quiere a mí?-

Espera un segundo... ¿Por qué Zasha está con ellos?, ¿Cómo dieron con ella?, por eso le dije que se aleje de mí para que no pasara esta mierda... CARAJO.

-fácil si te tiene a ti la tiene a ella-

-Ustedes 2 se quedan aquí con ella los demás a investigar-

Fui descendiendo de manera lenta apuntado con el alma silenciada a la cabeza de uno de ellos, dispare al que está detrás de Zasha y rápidamente al de alado desate la cuerda y caí detrás de ella.

-¿Qué demonios Zasha?- Pregunto alterada pero casi en susurro

-¿Alice?-Dice confundida

-Te quedaras aquí en lo que resuelvo esto tenemos que hablar- Digo con un tono neutral pero con algo de nostalgia.

-No tenemos nada que hablar me secuestraron por tu puta culpa- Me dice enojada y en susurros.

-Lo sé por eso tenemos que hablar para aclarar esta mierda. Ahora se buena y quédate aquí por favor preciosa no quiero que te hagan daño.-Le digo preocupada

-Vale pero me debes muchas explicaciones-

-Como diga la reina- Le comento con una sonrisa burlona.

Luego de asegurarla voy más adentro en el primer piso ve a uno de ellos, lo ataco por detrás y lo dejo inconsciente en el suelo, sigo revisando pero no veo nadie más subo al segundo piso con cuidado, la estructura está muy débil y se pude quebrar en cualquier momento visualizo 2 de los hombres de Kamski y procedo a dispárales antes de que seden cuenta.

Entro a un tipo de biblioteca parecía a la de Alexandria, veo al último hombre está analizando la llave dentro de una repisa de cristal con una almohadilla de tercio pelo morada y detalles dorados, observo como rompe el cristal y antes de que pueda tomarla el suelo debajo de sus pies se abre y cae en una de las trampas del castillo me acerco de manera sigilosa a tomar la llave pero antes de que la pueda tomar a pare él.

-Vaya, vaya, vaya pero que tengo ante mis ojos si es la mujer más bella del mundo. Alice Reed- Richard me mira con varios de sus hombre apuntándome.- Eres una belleza muñeca, no sabes cuantas ganas tengo de tenerte solo para mi.- dice mientras se me acerca.

-Ahórrate tu palabrería barata, se que quieres esto... pero lo siento ya es mío- Digo mientras lo guardo en la mochila- Y si me disculpas.- Corrí en dirección contraria a ellos mientras empezaban a dispararme y salte por la venta que había en la habitación.

-NO SE QUEDEN COMO ESTUPIDOS VALLAN POR ELLA LA QUIERO CON VIDA... ella es mía quiera o no y el atlas también.

Narrados omnisciente

Alice cayó al suelo rodando se levanto tan rápido como pudo y corrió hasta donde Zasha.

-VAMOS, VIENEN TRAS DE MI-

-ESTAS SANGRANDO- Dijo Zasha mientras corrían fuera de la cascada.

-Corre eso lo vemos después.- Dijo Alice agitada

La entrada estaba cerca y los hombres de Richard venían disparando detrás de ellas, otra bala logro darle a Alice pero esta solo soltó un quejido y siguió corriendo la adrenalina no dejo que sintiera la bala en su muslo.

-ARES- Dijo por el comunicador mientras salía de la cascada- Estoy herida acércate todo lo que pueda, te digo todo en la casa.-

-Vale- el simple mente respondió y fue al rescaté

-Sígueme por aquí hermosa-

Ares no tardo en llegar y recogerlas, se tiraron al agua y nadaron al yate que estaba más cerca cada vez, ares las ayudo a subir y encendió el motor para llegar al muelle

-¿Que carajos paso? ¿Por qué no dijiste nada antes? y ¿por qué esta Zasha aquí?- dijo ares alterado

-Hablaremos en la mansión estoy agotada.-dijo mientras se hacia un torniquete en la pierna.- Hermosa, ¿Me ayudas con el brazo?-le preguntó a Zasha.

-Claro.-   


HOLAA¡¡ se que estoy perdida pero ya volvimos.

 Lilimux

El Atlas Del Mas AlláDonde viven las historias. Descúbrelo ahora