Una promesa ~ Pedri González

Capítulo 24: Una trampa

~ Narra Dafne

Me quedé inmóvil y comencé a sentir un fuerte dolor en el pecho. Muchas personas dicen que es imposible sentir que el corazón de uno se rompe en pedazos, pero estoy bastante segura de que sentí como le pasaba al mío

Sentí que me faltaba el aire y mis mejillas se humedecieron por las lágrimas, quería salir corriendo, quería irme a casa y no habló de mi departamento, sentí que necesitaba volver a México

Pero solo lo quería, porque mi cuerpo no estaba dispuesto a reaccionar, limpie mis mejillas y cuando di media vuelta escuché la voz de Gavi

— ¿Qué coño haces tío? — camine lo más rápido que pude hacia la salida mientras sentía que todos se movían en cámara lenta

No me quedé a averiguar que respondía Pedri, no me interesaba. Acababa de joderme y lo peor de todo es que lo sabía, sabía el daño que me provocarían sus acciones

— Dafne — escuché que alguien se acercaba corriendo — Dafne

— Déjalo Gavi está bien

— No se que mierda le pasa, pero no dejes que esto te afecte

— ¿Qué no me afecte? — pregunté furiosa y decepcionada — Que me deje llevar Gavi, que le creí cuando prometió no lastimarme y aún así lo hizo

— Se que debe haber un explicación — intentó acercarse y dí un paso atrás

— ¿Y por qué no me la dijo antes de dejarme como una tonta frente a todos?

— No lo se, yo...

— Fuí una estúpida, me creí todo el cuento y fue para nada

— Dafne — está vez si lo deje acercarse y cuando estuvo lo bastante cerca me estrechó en un abrazo

No dijo nada, porque seguramente tampoco entendía lo que acababa de suceder, deslizó su mano sobre mi espalda para consolarme y las lágrimas salían más deprisa

— Dafne cariño — escuché la voz de Lucia — Es un cabron

— Mi niña — Sara me arrancó de los brazos de Gavi para darme un abrazo — ¿Nos vamos ya?

Asentí levantando la mirada para ver a Gavi, se veía enojado, preocupado y bastante confundido.

— Las llevo yo — Sira llevaba las llaves de su coche en la mano — Estoy bastante cabreada y necesito pensar

— Gracias

— Daff no agradezcas. Y tú — miró a Gavi — dile al cabron de tu amigo que necesitamos hablar y a mi estupido novio que deje de defender lo que ha hecho.

Subimos al coche para llegar a mi departamento. Tenía tantos sentimientos juntos que no sabia por dónde empezar y mis amigas tampoco

Estuvimos en silencio por bastante tiempo, todas me veían esperando a que dijera algo y yo me negaba a hablar, lo único que se escuchó fue el ruido de mi puerta. Cuando Sara abrió Mikky se hizo presente

— He traído helado, comida y chocolates — mire las bolsas que llevaba y efectivamente tenían todo lo que me gustaba — Dafne — Se acercó para darme un abrazo — ¿Cómo estás?

— Quiero irme a México — dije tras unos segundos de silencio

— No juegues con eso — Lucia me miró preocupada, sabía que podía irme con mis padres

— Lu la ha besado frente a mí

— Alguna explicación habrá — dijo Mikky con tranquilidad

— Lo mismo ha dicho Gavi, pero no se me ocurre ninguna que valga la pena.