Entonces, Te Conocí

Capitulo VI

Capítulo VI: Parte del Rompecabezas

P.O.V Kate Bishop

Era demasiado joven para cuando perdió a su padre en medio de la invasión Alienígena que amenazó Nueva York bajo el comando del dios de las mentiras. Recordaba como si fuese hoy cada emoción que experimentó cuando supo que algo muy malo estaba ocurriendo a su alrededor. Desespero. Angustia. Miedo. Mucho miedo. Un temor tan paralizante que de no ser por Clint Barton, habría muerto bajo algún escombro. Clint Barton y el arriesgado salto que marcó un antes y un después para la joven arquera. Los vengadores eran un grupo extraordinario; era fácil caer fascinado a los pies de alguien tan valiente como Capitán América o tan poderoso como Thor, dios del trueno, pero eran personas como Natasha Romanoff y Clint Barton quienes aún sin ser reconocidos a tan gran escala, habían impactado la vida de Kate; porque Clint no tenía superpoderes, no era un dios, no podía volar ni era inmortal, era solo un hombre que había decidido defender al mundo con las habilidades que poseía.

Era inspirador...

...y el motivo por el cual Katherine Elizabeth Bishop había accedido a ir con Yelena en lugar de seguir a Kingpin para recuperar a su madre.

Debía (¿necesitaba?) confiar en Natasha...en Clint...en que cumplirían la promesa que habían hecho.

Pero aún confiando...las dudas seguían presentes en su cabeza, flachando una y otra vez a medida que la mujer rubia y de armas tomar que manejaba como una completa desquiciada se desplazaba por las calles de Nueva York como si las conociese de años (lo cual era imposible considerando que le había estado preguntando que lugares debía visitar). El vehículo dio un giro dramático, incorporándose a una avenida, el sonido de las llantas raspando sobre el asfalto casi deja sorda a la arquera. Los tres canapés y las dos copas de vino que había ingerido durante aquella noche estaban haciendo estragos en su interior; sin embargo, la amenaza que Yelena había lanzado hace algunos minutos cuando Kate insinuó que vomitaría, seguía presente en su mente.

"Si vomito, me lanza fuera del vehículo."

"No creo poder aguantar más."

"¡Va a despedazarnos!"

Doblada en si misma, con ambos brazos alrededor de su abdomen y la frente apoyada de la gaveta integrada frente al tablero del auto, ladeó el rostro, clavando su mirada en su compañera. Yelena había estado tensa durante la mayor parte de la noche, y aún lo estaba, pero no tanto como minutos atrás. Su ceño se había relajado, y sus ojos verdes volvían a poseer esa calidez que habían portado cuando invitó a Kate a comer macarrones con queso. De alguna manera, su cabello y traje negro no daban fé de la batalla magistral que la viuda negra había sobrevivido; todo lo contrario a Kate, quien podía sentir como parte de su cabello había abandonado la liga con la cual lo había estado sujetando.

-...Ye...lena- murmuró.

La rubia desvió la vista hacia ella, las luces de los postes iluminando su expresión. El mover de las luces sobre su rostro era hechizante. Es...muy sexy. La arquera ignoró el pensamiento (no quiere decir que no estuviese de acuerdo con tal pensamiento, solo que...no era el momento). Sintió acidez en su garganta.

- Kate Bishop...

- Detente...

La pelinegra llevó una mano a sus labios, sintiendo las repercusiones de las arcadas en su garganta.

Yelena miró hacia el retrovisor y giró el guíe al tiempo que frenaba. El auto se movió de manera agresiva y Kate estuvo a punto de vaciar tomó el contenido en su estómago sobre la alfrombra. Con la misma agresividad, el auto se detuvo, y la pelinegra abrió la puerta lo más rápido que sus manos le permitieron, inclinándose hacia afuera, sintiendo el alivio inundar su cuerpo cuando hubo devuelto hasta lo que no había comido ese día. Estaría mortificada, al saber que había vomitado teniendo a una de las mujeres más hermosas que sus ojos hubiesen visto a pocos metros, pero para su sorpresa, Yelena no parecía afectada, solo golpeteaba con sus dedos el volante, silbando una canción que Bishop no podría reconocer aún si tuviese todos sus sentidos alerta.