Capítulo 4

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Esta historia no me pertenece, es una traducción. El autor original es Bertoti, usuario de Fanfiction.

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El resultado no deseado se mostró en la gran pantalla del campo de entrenamiento y las voces de la multitud resonaron aún más fuerte de lo habitual. Weiss no pudo hacer nada más que permanecer en el suelo y tragarse la derrota junto con la humillación de que su condición y sus esfuerzos fueran utilizados para elogiar a otra persona.

Para ser Schnee, debe ser placentero para los demás presenciar la caída metafórica de la princesa de su trono.

A través de esto, Weiss aprendió cada vez más sobre lo detestables que pueden ser las personas. Claramente, un rasgo que no es exclusivo de los faunus, como ella creía hasta hace unos meses. No llegó a pensar así en ese momento de derrota por mero egoísmo y despecho, sino por la clara demostración de malestar de la Chica Invencible.

Pyrrha quería estar en cualquier lugar menos allí.

Se sentía incómoda por haber ganado y Weiss no sabía cómo sentirse al respecto. Ciertamente la enojaba ser así, la del lado perdedor. Al mismo tiempo, se sentía inferior...

Los niveles de aura mostrados después de que terminó la batalla no le dieron a Weiss ninguna razón para pensar de manera diferente. A su lado, Yang había alcanzado niveles críticos mientras que Pyrrha y Nora estaban en amarillo, casi verde en el caso de la campeona de Mistral.

El aura de Pyrrha nunca parecía caer por debajo de la mitad, incluso cuando se enfrentaba sola a equipos enteros.

Una hazaña que nadie más podría replicar.

Ese fue el final de la clase de combate de la Profesora Goodwitch, una que se llevaba a cabo en parejas. Si bien Weiss y Yang no eran la mejor combinación del equipo, había demostrado ser efectiva en otros partidos... que habían ocurrido antes del incidente.

Recientemente, había tenido una racha de mala suerte. Aunque ella no era invencible, nadie lo era, aparte de Pyrrha, Weiss no podía ganar contra los mejores estudiantes de primer año.

Así que perdió... otra vez.

A fin de cuentas, tal vez era autoritario por su parte querer vencer a Pyrrha de entre todas las personas, pero ¿quién más era digno de tener como meta a superar?

Ciertamente no era Jaune, otra razón de la sombra que la atormentaba.

El chico torpe estaba cambiando considerablemente y mejorando a un ritmo alarmante.

Si bien su crecimiento era visible, ella parecía... estancada, por no decir en regresión.

Obviamente, Weiss no era tonta al no saber el motivo y la raíz de su problema.

El incidente que siguió a la investigación de Mount Glenn no la dejaba de pensar. Estos pensamientos constantes no le permitirían olvidar su mayor derrota. Uno que, para empeorar lo que no era ni remotamente agradable, era contra un miembro del Colmillo Blanco.

Peor aún, si Weiss hubiera estado sola en ese momento, probablemente estaría muerta ahora mismo.

Muerto a manos de esa organización criminal.

Las repercusiones de eso serían inconmensurables.

Con la muerte de la heredera de la odiada familia Schnee, la influencia de Colmillo Blanco crecería como nunca antes.

En el peor de los casos, considerando la implicación de ese loco, Roman Torchwick, podría desembocar en una nueva guerra entre razas.

No es que Weiss fuera tan importante, pero si moría a manos de esas personas, su padre, por mucho que ella no quisiera admitirlo, haría cualquier cosa para vengarse y aprovecharía esta oportunidad para posiblemente comenzar esta guerra él mismo.

𝐄𝐭𝐞𝐫𝐧𝐚𝐥 𝐏𝐫𝐢𝐝𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora