Capítulo 6

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Esta historia no me pertenece, es una traducción. El autor original es Bertoti, usuario de Fanfiction.

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—Mmm —Vegeta recuperó su mano sin tener que ensuciar la mesa con sangre cuando la chica tomó la sabia decisión de dejarlo ir, sin más remedio que considerar lo que acababa de aprender—. Esas llamas en tu cabello, ¿qué fue eso exactamente?

Si no lo hubiera sabido mejor, Vegeta diría que un Saiyajin estaba perdido en este mundo. Excepto que el aumento de poder recibido por su pequeño y emotivo episodio fue bastante ridículo, apenas duplicando lo que era originalmente.

Así que el doble de nada, seguía siendo nada.

—M-Mi Semblanza... —murmuró Yang, temblorosa y tratando de recuperar el aliento perdido. Antes de probar suerte en este pequeño juego, no estaba al cien por cien, probablemente ni siquiera cincuenta, debido al ejercicio de entrenamiento, ahora, sin embargo... Yang había vaciado el tanque por completo.

Sus ojos color lila ya no tenían el mismo toque de audacia arrogante cuando se centraron en este hombre. Lo que hizo no debería ser físicamente posible, independientemente de si era un verdadero cazador o no.

Todo lo que quedó en Yang fue una mezcla de confusión, respeto y una clara pizca de miedo.

«Semblanza, dijo —Vegeta hizo una búsqueda rápida en su scroll, buscando aprender los conceptos básicos que necesitaba saber—. Una habilidad única que tienen los usuarios de Aura.»

¿Eso significaba que Vegeta también podría tener algo así? Dependiendo de la habilidad que despiertes, ciertamente sería de gran ayuda.

Antes de que las preguntas pudieran despejarse, el daño causado llamó la atención.

—¡¿Q-qué pasó aquí?!

La camarera tiró los platos asustado y la comida se detuvo en las manos de Vegeta antes de que alguien pudiera reaccionar.

—No hay de qué preocuparse —Vegeta fue el primero en hablar, ignorando las miradas incrédulas obtenidas por su pequeña muestra de velocidad que hacía que Ruby pareciera una tortuga—. Simplemente ponga los daños en la factura y podrá incluir lo que le pidan.

Esta cuenta bancaria suya tenía tantos ceros que no le importaba, especialmente por la ayuda inconsciente que este grupo le estaba brindando.

Semejante amabilidad ganó algunos aprecio y logró aliviar el ambiente incómodo nacido de una hazaña teóricamente imposible, pero no todos compartían este sentimiento.

Weiss no dejaría que todo terminara tan fácilmente.

—E-eso... —la camarera consideró qué hacer, pero al ver que las chicas estaban armadas quedó claro que todas eran Cazadoras y eso le quitó gran parte de su poder de elección—. Está bien... sólo que, por favor, no destruyas nada más.

—¡Lo siento! —Ruby se apresuró a inclinarse repetidamente, lo que obligó a Yang a hacer lo mismo—. ¡No volverá a suceder!

Una chica honesta y respetuosa con los faunus, la asistente vio esto y asintió antes de irse.

—Yang, ¡¿qué tenías en mente?! —Weiss hizo a un lado los numerosos absurdos que tenía que cuestionar y ¡tenía una o tres cosas que decir primero!— ¡¿Sabías que los civiles pueden informar sobre el uso indebido de las habilidades de una Cazadora?! ¡Eso sería una marca permanente en nuestro historial con un peso similar al de cometer un crimen!

Vegeta fue tomado con la guardia baja, no esperando que esta chica pasara de ser una refinada princesa de estándares terrenales a demostrar la actitud de un Saiyajin.

𝐄𝐭𝐞𝐫𝐧𝐚𝐥 𝐏𝐫𝐢𝐝𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora