Kitsune

🌼The Kiss🌹

Sebastián volvió con los helados, que brillaban con la luz hermosa del sol.

El mío era de vainilla y el suyo de mango. Los dos helados traían una cucharita de plástico en la bola. La mía amarilla y la de Sebastián, rosa.

Sebastián había pedido que les pusieran un topping. De todos los toppings que había Sebastián eligió los de virutas y trocitos de trufa.

Yo elegí la primera opción y él la segunda.

Hacía un tiempo precioso, una tarde perfecta. Aunque hubiera gente, allí se escuchaba el dulce sonido del silencio y era maravilloso. Había una suave brisa que jugaba con mi pelo y revolvía un poco el de Sebastián, dejándole un aspecto gracioso. Sebastián me miró.

-¿Te gusta?- me dijo Sebastián con tono burlón.

-Me reí un poco, tengo que reconocerlo - dije. Y me seguí riendo ya que se había dado cuenta.

-Oh, Lenni, no sabes cuanto me alegra poder estar contigo aquí, en un parque de la maravillosa Francia...

Sebastián dejó sin completar la frase, ¿lo estaría haciendo a propósito para que lo hiciera yo? Había que probar suerte.

-...la ciudad de la luz, ¿no?-dije.

-O del amor- dijo Sebastián acercándose a mí.

-Bueno, eso también es-...

No pude acabar la frase porque...

¡Ay!

¡Increíble!

¡Sebastián me había besado a media frase!

Lo miré sonrojada. Él también me miraba. No sabía que hacer, iba a decir algo, pero el fue el que primero abrió la boca.

Entonces escuché unas palabras que ningún chico me había dicho, unas palabras cariñosas que decían...