Capítulo 2

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Ya ha pasado una semana desde que Yunho logró acercase a Jongho. Al conocerlo mejor se dio cuenta que ese pequeño castaño no tiene ni idea en relaciones sexuales, es demasiado tímido. Y a Yunho le encantaría enseñarle unas cuantas cosas sobre el sexo.

San no está de acuerdo con que Jongho se lleve con Yunho, él lo conoce demasiado bien, él sabe sobre sus fetiches y lo que ocurrió con aquel chico. Jongho le dice que solo son chismes de la gente y que no debe dejarse llevar por los comentarios, y que al contrario, debería tratar de hablar con Yunho porque él es una gran persona.

— Jongho, enserio, debes alejarte de él.

— He dicho que no, a mi no me parece una mala persona, es muy lindo.

— No sabes en lo que te metes, Choi Jongho, tu inocencia no te deja ver más haya de lo que realmente son las personas— San suelta un gran suspiro resignado.

— Es que sabes que soy muy curioso... me gustaría saber más de él—Jongho mira a Yunho pasar fuera de su salón, este lo mira y le guiña un ojo para después seguir su camino.

— Entiende que él sólo busca lastimarte, Jongho.

— No lo creo.

— Después no vengas llorando

— Bien...

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Las horas de clases pasan rápidas para Jongho, a él le encanta estudiar, siempre ha sido de buenas notas.

— Hola, Jongho...— Un Yunho sonriente se acerca a él y le da un pequeño beso cerca de los labios.

— Ho-hola Yunho— Jongho le sonríe dulcemente y agacha su cabeza con las mejillas sonrojadas.

— Tan tierno...— Yunho pellizca dulcemente la mejilla derecha del más bajo y este ríe avergonzado.— Vengo a invitarte por un helado, ¿aceptas?

— Claro... vamos— Yunho toma su mano y lo lleva hasta el estacionamiento donde se encuentra su motocicleta.

— ¿Nos iremos en esto?

— Claro..., ¿no te gusta?

— Si, es muy linda, muy varonil. Muy tú — los dos ríen. Yunho se sube a la motocicleta y mira a Jongho indicándole que suba detrás, este hace caso y sube.

— Sostente de mi— Jongho un poco sonrojado hace caso y abraza por la cintura a Yunho. La motocicleta arranca y Jongho sostiene más fuerte la cintura del contrario.

El aire fresco pega en su cara volando sus cabellos.

Un minuto más tarde llegan a la heladería y bajan de la motocicleta, entran al local y piden sus helados. Jongho lo pide sabor fresa con chocolate y Yunho de vainilla.

— ¿Te gustaría ir a mi casa? — pregunta Yunho con descaro, pero Jongho no entiende sus intenciones.

— Claro, ¿Qué haremos? ¿Ver películas?— Yunho ríe en su interior y acaricia la cabeza del más bajo.

— Haremos más que eso...

— Oh, ¿qué?

— Ya verás— Jongho asiente con la cabeza y sigue comiendo tranquilamente su helado.

Al terminarlo por completo los dos suben de nuevo a la motocicleta partiendo a la casa de Yunho.

Al llegar Jongho ve la gran casa, se ve que Yunho en verdad tiene dinero.

— ¿Vives solo?

— No, mis padres están de viaje y tengo la casa solo para mi.

— Genial...

Al entrar la casa es aún más impresionante para Jongho, mira todo con maravilla y entusiasmo.

— Vamos a mi habitación, allá tengo algunos juegos.

— ¡Me encantan los juegos!— dice Jongho alegre, Yunho lo guía por las escaleras y entran a la habitación.

— Bienvenido a mi habitación, Jongho.

》O más bien a tu infierno《

Ese infierno que sin saberlo, le terminaría gustando más de lo que alguna vez deseo...

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