Al venirme por tercera vez no pude evitar gritar por el intenso placer que me causó tener ese orgasmo, mi cuerpo terminó separándose abruptamente del dildo mientras temblaba como si estuviera en la zona más fría de la Tierra, yo estaba recostada en el respaldar de la silla tratando de recuperar el control y el aliento que había perdido con cada montada que le había dado a ese dildo.
Hubo un momento de calma en ese momento podía escuchar los latidos de mi corazón y eso me hizo una idea de qué tan intenso fue ese momento de pasión y locura que tuvimos y lo confirmé al volver a abrir mis piernas y ver que mis labios palpitaban casi al mismo ritmo que mi corazón, pasé mis dedos sobre mis húmedos labios para sentirlos más de cerca, pero al tener el tacto de mis dedos sobre los labios de mi coño me estremecí un poco ya que los tres orgasmos que había tenido me dejaron muy pero muy sobre estimulada, estaba muy convencida de que si volvía a masturbarme me correría sin ningún inconveniente, verme en el espejo nuevamente abierta con mi clítoris y parte de mis labios palpitando me excitó aun más...
-estás...estás palpitando al mismo ritmo que mi corazón....eso me gusta
Volví a sentir que la bestia despertaba en mí de nuevo en mi interior, mientras me miraba al espejo volví a tocarme las tetas y a pasar mis manos sobre mi coño aun si sabía que estaba muy sobre estimulada y mis dedos provocaban que me estremeciera, esa era la señal de que mi cuerpo me pedía más...quería más de mí, necesitaba que le diera más por muy cansada que estuviese en el momento...y yo estaba ahí para dárselo sin importar nada
-necesito más...esto...esto no es suficiente...
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Dolly (+18)
Historia CortaUna chica llamada Dolly explica con lujo de detalle cómo una mañana estando sola en la dulce comodidad de su hogar tiene una de las experiencias más eróticas en toda su vida que ni siquiera con su esposo ha podido sentir en los 10 años que lleva de...
