Capri Persson ⸻ F1

16 // this is life

▶『 Faenza, Italia 』

Mayo, 2023   

Al volver a casa después de Miami me instalé con el equipo para analizar lo sucedido en las oficina de la escudería. Teníamos hasta Imola para recuperar los daños y recibir un comunicado de la FIA sobre quien tendría una sanción, el veredicto final.

Luego de volver del hospital Jean me entregó las preguntas que habían surgido de la prensa, esta vez con muchas más de las que solían ser por haberme ido sin escribir el comunicado. Todas aportaban lo suyo para volver la rivalidad con Max aún más grande. La preguntas eran rebuscadas, estudiadas específicamente para acorralarme incluso teniendo tiempo de pensar y repensar mi respuesta sin la presión de contestar estando presente en una rueda de prensa. Eran intensas y muchas hacía alusión a Abu Dhabi 2022. Cuando tuve listo mi comunicado se lo envié a Jean firmado y al día siguiente las noticias explotaron al respecto.

Recuerdo haber encendido el televisor para escuchar algo mientras guardaba mis cosas antes de irme para tomar el vuelo de regreso. Un titular anunciaba "Capri Persson sería capaz de matar sus rivales por este campeonato".

Era duro que la gente lo diga de esa forma, porque mi intención jamás había sido matarlo. Me había pasado toda la noche reviendo el accidente para intentar comprender porque toda la culpa recae sobre mi. Era verdad, el adelantamiento fue mío, la acción la inicie yo. Pero jamás tendría intenciones de matar a nadie, sea o no sea Verstappen. Seguido del titular pusieron un fragmento de la rueda de prensa con Lewis, George y Fernando, quienes habían ganado la carrera.

―¡Lewis! ¿Tuviste la oportunidad de ver el accidente Persson-Verstappen?

―No, no tuve la chance, pero por lo que se fue bastante caótico. Podría haber terminado muy mal―respondio Hamilton con tranquilidad.

―¿Esta rivalidad te recuerda a aquella que se traían con Verstappen en el 2021?―preguntó otro periodista y el piloto pensó su respuesta un segundo.

―No, sinceramente no. Max y yo fuimos rivales por un tiempo pero era muy diferente. A él siempre le gustó jugar al límite y yo siempre fui un hombre muy correcto al respecto―se rasco la nuca. ―Lo que hay entre Max y Capri es distinto. Hay algo más que ninguno de nosotros puede descifrar. Hay una cicatriz antigua que aún no cerró, hay un dolor previo, una historia previa. No tengo el placer de conocer a Persson en persona, pero puedo decir que no es un piloto que acepte una derrota de la manera que sucedió. Pierdes la confianza en ti mismo y dado que su contrato termina este año, tu cabeza siempre te irá en tu contra cuando algo así sucede―explico y tuve que sentarme en el borde de la cama para prestar mayor atención a la entrevista. ―No se con exactitud que sucedió en la pista, pero yo creo que ninguno de nosotros está aquí para asesinar a nadie. Puede haber mejores, peores, más agresivos, menos agresivos, pero ninguno de nosotros es un asesino como lo pintan ahora. Todos los pilotos aquí sabemos los riesgos que hay en el deporte, tanto físicos como mentales. Pero llamar a uno de nuestros compañeros un asesino creo que es suficiente. Repito, no he visto lo que pasó en la pista, en cuanto terminemos, lo veré. Pero ya sea Persson, Max, George o quien sea, no me parece correcto la etiqueta que están utilizando―concluyó alejándose del micrófono y me quede estática frente al televisor en mi cuarto de hotel con la maleta abierta.