1. El Pasado I

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I.



El joven en una versión pre adolecente se encontraba entrenando con un hombre que parecía ser su padre, sus golpes erraban debido a la velocidad de aquel hombre el cual solo lo provocaba mas y mas, el joven niño con cada insulto que su padre le tiraba golpeaba con mas furia, al punto de que sus golpes no tenían forma de ser predecibles, había perdido el control y sus golpes empezaban a cortar el mismo aire, su padre al ver el descontrol del chico tuvo que frenarlo antes de que empezará a destrozar su aparente castillo, de un solo golpe directo al cuello noquea a su propio hijo el cual se desploma inconsciente en medio del suelo.

Pasadas las horas el joven se despierta con un fuerte dolor en el cuello, levantándose con la mano aferrada al cuello, camina lentamente hasta lo que parece una amplia sala llena de antorchas. -Padre? Que haces?- Su padre, el cual estaba meditando sobre una alfombra se levanta y gira interrumpiendo su entrenamiento mental -Estoy entrenando, Lans, ven acompáñame un momento- El niño sigue a su padre alejándose de la gran sala y caminando por un extenso pasillo que tenía por la derecha grandes paneles de vidrio y por la izquierda varias puertas que conducían a varias secciones del castillo. -Escucha hijo, tu eres el único descendiente de una extensa familia de Dioses encargados de mantener el orden en el universo e impedir que fuerzas oscuras se apoderen de todo, mi padre fue el mejor guardián hace 5000 años, yo llevo 4156 años siendo guardián del universo, dentro de 344 años tendré que retirarme y entregarte el puesto para que puedas mantener este ciclo interminable de guardianes, cada uno de nosotros tiene poder y control sobre el fuego, ya sea su intensidad o su estado, todos nacemos con ojos que indican el rango de nuestra divinidad, cuanto más puro y oscuro sea, más poder yace en su interior, como tú, hijo mío, tus ojos tienen un dorado intenso reflejando un poder tan alto que ni yo podría soportar, ahora, tienes alguna pregunta o duda?-.

El chico agacha la mirada para mirarse las manos y luego vuelve a mirar a su padre, -Puedo volar? Porque sería genial poder volar, también puedo expulsar fuego de mis ojos? Como puedo ser mas fuerte?-.


-Todo a su tiempo hijo, aprenderás a usar tus poderes cuando empecemos el verdadero entrenamiento, todo esto era solo para prepararte, y para responder a tu pregunta, si puedes volar pero no puedes ser mas fuerte-.

Lans cierra su puño y lanza un golpe a la cara de su padre el cual detiene el golpe con su dedo índice, -Ya te dije no serás fuerte hasta que no empieces tu entrenamiento-. Diría esto con un tono de voz grave para luego apretar su mano y tirarlo por el ventanal haciendo que este quede a la deriva en el espacio junto con trozos de vidrio. A continuación sale del castillo a toda velocidad para asestar un golpe en la cara de su hijo, -El enemigo nunca te dirá que va a atacar, esto no es un juego Lans, tienes que tomártelo en serio o pondrás en un enorme riesgo a todo el universo, ahora deja de quejarte y ataca-.

El chico, ya furibundo expulsa fuego de sus pies para arremeter contra su padre y empezar a lanzar golpes envueltos en fuego al azar los cuales estaban tan calientes que pareciera que se fuesen a derretir sus propias manos y todo lo que tocase, golpe que lans tiraba golpe que su padre evadía con facilidad, eso lo enojaba aún mas al punto de que su cuerpo empezaba a liberar una intensa y aterradora llama la cual su padre evitaba lo mas que podía aunque fuese inevitable. -Si no puedes controlar ni tu mente al momento de luchar tenemos un largo trabajo por delante-. Ya cansado y quemado del no poder evadir el fuego que su hijo emitía, vuelve a noquearlo de un golpe en el cuello pero esta vez su mano queda rostizada al no poder soportar el calor.


"Sentado en una hermosa llanura, acariciando con sus manos el corto césped mientras miraba hacía el sol con una respiración tranquila, preguntándose si realmente merece todo esto, su vida era tan tranquila que dudaba de merecerla debido a sus acciones, su paz se ve interrumpida debido a una memoria de su padre cuando solían entrenar y se levanta para ir volando hasta una pequeña cabaña en medio de un bosque apartado de toda civilización"


Su cabeza le dolía y su cuerpo le ardía, su cama estaba totalmente chamuscada, sus ojos estaban irritados y sus manos estaban enrojecidas, estaba completamente adolorido debido al repentino y sorpresivo combate contra su padre, aun no lograba entender como lograría controlar sus poderes, se levanta de la cama para ir a tomarse una ducha ya que era insoportable el calor que tenía dentro, era como si el fuego en su interior tratase de salir y arrasar con todo a su paso, ya luego de ducharse se quedo parado frente al espejo mirándose como si intentara buscar la respuesta al control de sus poderes, pero solo podía ver sus moretones, golpes y cicatrices que tenía debido al entrenamiento con su padre. Entonces entra su padre y lo mira raro. -Lans que haces?- el chico por la sorpresa se lleva un susto, -Padre! no estoy haciendo nada, que sucede?- conteniendo la risa le responde -Ven te necesito-. Caminaron por el extenso pasillo en dirección a la sala de invitados que se situaba cerca de una gran puerta que daba a las escaleras que daban a otro gran pasillo en el segundo piso.

Ya entrando a la sala lo primero que vio lans era un señor muy alto cubierto por una gran capa que lo único que dejaba a la vista eran sus ojos de un color rojo que a simple vista hacia que incluso su alma tuviese escalofríos, lans quedo petrificado del miedo mientras su padre caminaba con total normalidad hasta el misterioso ser, -Ran, hermano cuanto tiempo, como estas?- dijo el señor con un tono de voz amigable como si se conociesen de toda la vida, -Ni me lo recuerdes, a pasado un buen tiempo hermano, ven quiero que conozcas a mi hijo Lans- dijo este extendiendo la mano y señalando a su hijo que aún estaba junto a la puerta pero ahora extrañado, su mente entro en conflicto al ver lo bien que se llevaba su amargado, tranquilo y aburrido padre con ese extraño ser que infundía miedo con la mirada aparentando una profunda crueldad.


-Hijo ven aquí quiero que conozcas a un viejo amigo- Lans cauteloso se aparta de la puerta y se dirige hasta donde se encontraban su padre y el misterioso señor al que le quería hacer bastantes preguntas, se paro al lado de su padre y trato de no ver a los ojos al señor para así no mostrar miedo alguno ante su presencia y no dejar a la vista debilidad, -Que tal señor, soy Lans, es un gusto conocerlo- levando y extendió su mano a la altura de la boca del estomago de su padre, mano la cual tomo el señor a modo de saludo respondiendo -Un gusto joven Lans, mi nombre es...- su presentación se ve interrumpida debido a un ser aparentemente hecho de oscuridad, materializado de golpe arriba de ellos atacándolos sin piedad alguna, Ran y su amigo pelean contra la sombra mientras Lans se quedaba en un rincón asustado, el compañero de Ran queriendo acabar con el problema rápidamente, extiende su brazo y con su cabeza le hace un gesto a Ranketsu para que se aleje, acto seguido expulsa una enorme y poderosa llamarada que incinera parte de su capa y dejando a la vista el brazo del ser.

-Uff, eso sirvió de calentamiento- dijo Ranketsu mientras que su compañero se estaba cubriendo el brazo todo chamuscado, -A mi no me resulto divertido, que falta de respeto interrumpir nuestra reunión, ve a ver a tu hijo, parece estar aterrado- señala con su otro brazo al chico arrodillado en un rincón de la sala temblando de miedo. Ranketsu se acerca a el y lo mira con desaprobación -Lans que haces? le tienes miedo a una sombra?- Lans quito sus manos de la cara y dejo de temblar -Padre nunca me dijiste lo aterradoras que eran las sombras, en parte tu tienes la culpa por casi no hablarme de como eran-, coloca sus manos en el suelo para impulsarse y pararse tratando de encarar a su padre, -Cuida tu tono conmigo, si tuviste miedo no es mi culpa, no me culpes si eres débil, que no quieras entrenar ni hablar conmigo no significa que yo sea culpable de que seas miedoso-, Lans golpea a su padre y sale enojado de la sala.

Al salir de la sala corriendo da vuelta su mirada para ver a su padre furioso salir de un portazo de la sala y perseguirlo a lo que Lans intenta correr lo mas rápido que puede con la desesperación y el arrepentimiento corriendo por sus venas, tropieza con un pedazo de alfombra que previamente su padre había desalineado mientras lanzaba a su hijo por la ventana y cae al suelo dándose un buen golpe en la cara y permitiéndole a su padre que lo alcance y empiece a golpearlo con fuerza en la espalda causándole un gran daño a su columna. -AHORA QUIERO VERTE GOLPEARME MOCOSO, VAMOS GOLPEAME, DONDE ESTA TU ENOJO AHORA!? VAMOS GOLPEAME!- su padre le gritaba mientras masacraba el cuerpo de su hijo.


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