𝑰 𝒘𝒂𝒏𝒏𝒂 𝒃𝒆 𝒚𝒐𝒖𝒓𝒔 𔘓𓂃 ࣪˖ ִֶ

°.Cap 18.°

Holaaa! Este capítulo no tratará de los Pevensie. Como en el capítulo anterior quedó en contar que es lo que había sucedido.

En este capítulo se revelará la infancia de nuestra protagonista.

Aviso que este capítulo trata de temas delicados, así que nada de esto es en forma de burla o algo así, espero y entiendan.

Sin más que decir, los dejo para que lean 💕

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Agosto 23, 1927:

—Vamos cariño! —Le decía el señor Robert a su esposa—

—Ya casi! —decía su esposa casi sin fuerzas—

—Listo! Aquí tiene señora, es una linda niña —dijo una enfermera—

—¿Qué? —preguntó Sylvia, la esposa de Robert—

—¿Qué sucede cariño? —le preguntó su esposo— Carga a nuestra niña mi amor —le sonrió con la pequeña en brazos—

—Yo... Quería un niño —dijo Sylvia—

—Oh vamos! No pienses así, que de malo tiene, más adelante tendremos un niño, por ahora hay que gozar de esta hermosa pequeña —dijo el Sr. Robert viendo con amor y cariño a su hija recién nacida —

—¡No voy a cargarla! —le dijo Sylvia— aléjala de mi.

—Estas mal.. —fue lo único que dijo el Sr. Robert.

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—Mamá! —dijo la pequeña Alexandra de 4 años corriendo a su madre— mira lo que te hice —dijo con una sonrisa entregándole un dibujo—

—Ah. —dijo con desprecio — Gracias

—Somos tu y yo —dijo la pequeña con una sonrisa—

—Bueno, vete ya a tu cuarto. Tu padre está por llegar, y solo atormentas mi día —dijo sin más para voltearse eh irse a la cocina—

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—Por dios! Puedes al menos demostrar una pizca de amor a tu propia hija?! —le dijo el Sr. Robert a su esposa—

—No quiero! —le dijo sin más— Esa niñita nada más es un estorbo a mi vida. Me arruinó toda mi vida!!

—¡¿Cómo puedes decir eso?! ¡Es nuestra hija! —le dijo el Sr. Robert—

—Nunca —comenzó a decir Sylvia— escucha bien eh, nunca esa mocosa llegará a recibir afecto mío, me escuchaste?

—¿Por qué te pones así?, ¡¿Solo porqué no nació siendo un maldito niño?! —le dijo el Sr. Robert incrédulo —

—No es solo eso, tú sabes bien que fui obligada a estar contigo, nunca te amé. Ni llegaré a amarte —soltó la mujer —

— La niña no tiene la culpa de nada.. —le dijo su esposo—

—Si la tiene. Tú sabes bien con quien quería estar, y a quien amo realmente. —dijo Sylvia— Tu y esa niña son de lo peor para mi.

Mientras tanto, la pequeña Alexandra de 5 años escuchaba toda la discusión escondida en la puerta de su habitación, pues según los padres. Ella estaba "dormida".

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—Mamá? —dijo una Alexandra de 10 años —¿Quién es el?

—Te importa? No. Así que lárgate a tu habitación, y pobre que tu padre se llegue a enterar de esto. —dijo amenazante la madre hacia su hija—