De otro mundo | Chico Bestia [BL]

capitulo cinco: "dulce II"

   El roce de las manos de Gar quema en cada pedazo de piel que toca, haciendo que suspire. La manera gentil en que le acuesta en la cama es algo completamente adorable, besándolo mientras quita su camisa de manera lenta, como pidiendo permiso en cada movimiento. Yen no le va a apartar, ha deseado aquello desde que describió que las cosas en la tierra eran diferentes, descubriendo cuanto quería estar, de esa manera, con Chico Bestia.

—Estas temblando. —Yen se da cuenta cuando Gar pasa de besarle para enfocarse en su short, intentando desatar la cuerda que se ajusta en su cadera.

—Lo siento, es la primera vez que hago esto. —Gar sonríe, avergonzado por estar tan nervioso, pasando una mano por su cabello en un intento por calmarse. Esta arrodillado entre las piernas de Yen, a quien le ha quita la camisa al comienzo. Él tampoco lleva la suya, mostrando su torso desnudo con los músculos que ha ganado por años de entrenamiento.

—Para mi es igual. —sentandose en la cama, Yen queda cara a cara frente a Gar, viéndole antes de apartar la mirada, desviandola a su cuerpo. —No es necesario apresurarse. —lleva una mano al pecho del chico de piel verde ante él, deslizandola hasta el borde del short que lleva, el cual desató previamente cuando estaban en la playa. —También me siento algo nervioso.

—No parece que sea así para ti. —Yen, en comparación, se veía más seguro sobre lo que hacía.

—Lo es. —acercándose para susurrar contra los labios de Gar, toma una de las manos del chico, para guiarla hasta su pecho.

Entonces Chico Bestia siente como el corazón de Yen va tan rápido como el de él.

—Pero si estás demasiado nervioso, déjame todo a mi. —tomando por sorpresa a Chico Bestia, Yen lo empuja sobre la cama, besándolo mientras desliza una mano por dentro de su short, acariciando el miembro de Gar por sobre la tela de su boxer.

—Yen. —Chico Bestia se sobresalta, separándose del beso para ver en directo a donde Yen tenía su mano, sosteniéndolo de los hombros. —¿Qué estas- es-

Nunca nadie (a excepción de él mismo) lo había tocado ahí. Y era demasiado diferente a cuando lo hacía por su cuenta ¡demasiado! Aunque sólo era por sobre la tela, sentir la mano de Yen, tocandolo, era alucinante.

—¿No te gusta? —Yen se inclina para besar a Chico Bestia detrás de su oreja. —¿Lo hago mal? —pregunta, pero sin detener sus caricias, apretando el bulto en su mano.

Ante el apretón, que se siente ridículamente bien, Chico Bestia debe morder el borde de su labio para no gemir por algo tan simple. —Continua, se siente bien. —dice, recostandose por completo en la cama, permitiendo que Yen siga, inclinándose para comenzar a besar y marcar su cuello. —¿Dónde... aprendiste todo esto? —Gar siente que está hundiéndose en una nube por las atenciones de su increíble novio.

—Internet. —y por alguna razón, pensar en Yen viendo aquellos videos sucios (como cualquier adolescente curioso) le excita de sobremanera. —Crecio. —el alienígena dice de una manera demasiado inocente que avergüenza a Gar. Yen entendía todo el concepto del sexo y el cuerpo, pero sentirlo por su cuenta era diferente. —Intentaré algo más. —Yen quita el short de Chico Bestia del camino, seguido de su boxer, tomándose un segundo para apreciar el pene semi erecto de Gar. Y de manera automática, su boca se llena de agua, con su corazón acelerándose por un solo pensamiento.

—¿Algo más? —Chico Bestia se apoya en sus codos para alzarse y ver a Yen, quien toma sus piernas para abrirlas, acomodándose entre ellas. Y Gar tarda dos segundos para entender qué va a hacer Yen, cuando toma directamente su pene. Y la sensación de la mano caliente de Yen le hace sobresaltarse. Sin embargo, no es nada con lo que continúa.