𝐒𝐏𝐈𝐃𝐄𝐑𝐍𝐎𝐈𝐑𝐄~Hobie Brown

10.Lᴇᴛ Iᴛ Dɪᴇ

Tierra 928

Miguel contó su triste historia de como el universo en el que trató de vivir se destruyó por su culpa y su hija con él.

Me sentí mal.

Yo me metía con él pero lo quería mucho. Me había dado una oportunidad cuando yo no veía salida y había sido muy bueno conmigo.

—Me equivoqué —admitió Miguel tras contar su historia—Rompe cánones, salva a suficientes y podríamos perderlo todo

—Van a nombrar capitán a mi papá—murmuró Miles y me tensé, mirando a Hobie. Este me miró igual. El chico sostuvo su cabeza.—La Mancha lo hará, lo va a matar. ¿Y cuando va a pasar?—nadie le respondió y apreté el puño al notar su frustración — ¿Cuándo va a pasar?

—En dos días, cuando jure el cargo — respondió Miguel

—Eso dice el modelo—señaló Laila

—Lo siento, Miles—asintió Miguel

—Envíame a casa —ordenó Miles desesperado

—No puedo hacer eso —negó Miguel—Ahora no

—¿Y que esperas que haga?¿Dejarlo morir?—replicó Miles y miró a Gwen— ¿Y tu papá? ¿El es capitán, no?

—Si —murmuró Gwen triste

—¿Y no harás nada?—reclamó Miles incrédulo—¿Y tú, Peter? ¿Tu tío ben?

—De no ser por el tío Ben, la mayoría no estaríamos aquí, Miles, y todo lo bueno que hemos hecho, no habria pasado—respondió Peter y negué la cabeza

Si yo hubiera podido evitar las muertes de mis seres queridos, lo habría hecho sin pensarlo.

—Entonces ¿debemos dejar morir a la gente porque un algoritmo dice que lo haga?— ¿Escuchan lo horrible que suena eso?

—Debes escoger entre salvar a una persona o a un universo entero.—replicó Miguel

—¡Puedo salvar a ambos!—respondió Miles

—Miles, todos quisieramos vivir la vida que anhelamos—respondió Miguel —Créeme, yo lo intenté, y mientras más lo intentaba, más daño hacía. Ser Spiderman es un sacrificio. Es a lo que te apuntaste.

—¿Qué es esto?—reclamó Miles al ver que muchos Spider-Mans se ponían a su alrededor y yo me acerqué a Hobie, agobiada por tanta gente—¿Esto es un tipo de intervención?

—Sabemos que es duro, pero es la verdad Miles.

—Tenías razón, Gwen, no tenías que haber ido a verme—negó Miles y la nombrada bajó la cabeza con los ojos llorosos

—Oye, chico...—Peter fue interrumpido

—No me llames así—gruñó Miles molesto

—Bien dicho—asintió Hobie, pasando un brazo por mi cintura

—Eso es, Morales—sonreí ladina

—No ayudan, chicos—negó Jess

—Que bueno—comentó Hobbie indiferente

—No era mi objetivo—admití, cruzándome de brazos mientras miraba a Miles

—Miguel, no puedes pedirme que no salve a mi padre—replicó Miles

—No te lo estoy pidiendo—negó Miguel y lo encerró en una jaula como las de las anomalías

Eso no me gustó nada y me puse alerta.

—Miguel—reproché y Miguel me miró con disculpa, aunque no lo soltó

—¡No, para!—le espetó Gwen a Miguel

—Si lo soltamos, causará más daños—respondió él

Miré a Hobie y después a Miles, que estaba asustado y molesto.

—Morales—susurré y nos miró

—Las palmas—le recordó Hobie y le guiñé el ojo

—Siento que las cosas hayan acabado así, chico—comentó Miguel

—¡He dicho que no me llaméis así—reclamó Miles furioso y sus palmas empezaron a brillar furiosamente

Hobie y yo sonreímos y él me cubrió un poco cuando Miles se cargó la jaula.

La mayoría cayó al suelo de la onda expansiva.

Hobie soltó una risita y Miles me miró un segundo, asombrado aún por lo que había hecho.

—Corre, Morales—le sonreí y él salió corriendo

—¡Miles!—Miguel lo empezó a seguir y después el resto de Spider personas

Alcé una ceja cuando Hobie abrió un portal.

—¿Te vas?—repliqué

—Dimito—asintió Hobie

—¿Me vas a dejar sola?

—¿Me vas a extrañar?—preguntó y me crucé de brazos, sabiendo que lo haría, a lo que él sonrió apenas—Oww, me extrañarás, gruñona, que linda.

—Calla —repliqué

Me pegó a su pecho con su telaraña y me rodeó la cintura con su brazo.

—Ven conmigo, Nixie—pidió, con sus ojos brillando con ilusión

—Me encantaría...—admití y miré por donde se habían ido todos—Pero primero tengo que ayudar a Miles, Brown

—De acuerdo—me sonrió apenas con comprensión —Cuando acabes, o incluso antes, por favor, ven a verme.

A lo último, se acercó mucho a mi rostro y sonreí apenas.

—Hecho—asentí y picardía cruzó sus ojos—Nos vemos, Hobie

—Cuídate, gruñona, por favor—pidió, con sus labios a centímetros de los míos

—Te lo prometo—asentí—Nos veremos pronto, Hobbs.

—Más te vale, Nixie—asintió él y besó mi cachete antes de susurrarme—No sabes las ganas de besarte que tengo, pero me lo reservo para cuando nos veamos de nuevo.—me sonrojé furiosamente y él sonrió—Adiós, gruñona.

—Adiós, anarquista—saludé y pude ver su sonrisa antes de que desapareciera por el portal

Sacudía la cabeza y eché a correr en dirección a los demás, con el objetivo de ayudar a Miles a escapar.

Estaba con él.

Un regalito para el lunes, que lo disfruten.