Tattoo//Sung Jin Woo [Pausada]

Capítulo 20

Miraba como el portal se armaba frente a mi. Uno de rango D, pero sabía que no era así. Podría simplemente entrar y destruir todo para que Jin-Woo no lo hiciera.

Suspiré y me quite los lentes para ponerme la venda. Entre sin más mirando alrededor.

No había ningun monstruo, lo cuál me resultaba extraño, pero teniendo en cuenta que si era para que el pelinegro viniera, era obvio.

Me centre en ir hacia donde más venía la energía, en mana se concentraba más en un área. Era una doble mazmorra, lo supe cuando mire la puerta frente a mi.

Abrí las puertas sin mucho esfuerzo. Voltee hacia atrás cuando note las presencias de cazadores de rangos inferiores. Mire el reloj en mi muñeca, no había pasado tanto tiempo desde que apareció.

-Hagamos esto rápido- dije para mí.

Entre al lugar, estaba lleno de estatuas, tal cual me había contado el pelinegro, una era de gran tamaño, sentada en el centro, había varios con armas y armaduras, otras con instrumentos y por última.

Mire la estatua con la placa grabada, me acerque y leí las instrucciones. Frunci el ceño al imaginar lo que tuvo que pasar Jin Woo, la desesperación del momento sin entender nada y con el miedo a morir.

-¿Me escuchas verdad?- dije en voz alta a esta, no respondió a lo que la miraba sin ninguna expresión en mi rostro- se que lo haces y se que eres tú, lo veo con mis ojos.

-Jajaja- la estatua rio y volteo a verme-  me resulta extraño que un gobernante sepa de este lugar- el tono con el que lo decía era divertido.

-¿Eres el arquitecto, verdad?- pregunte.

-Para servirte- frunci el ceño al verlo- aunque... No eres un gobernante, solo tienes su aura.

-Responde, ¿Por qué quieres que Sung Jin-Woo vuelva a este lugar?- pregunte sin prestarle atención a lo otro.

- con que era eso- río un poco- ¿Que es lo que deseas saber con más especificación?

-Si él viene... ¿Se convertira en el monarca de las sombras?- pregunte.

-No- respondió- no se convertira en el monarca- suspiré y asentí. Di media vuelta para irme-¿Eso es todo?- pregunto confundido.

-Era todo lo que quería saber- respondí alzando los hombros. No sé lo espero, lo sabía.

Una estatua se movió, está era grande y con armadura. Tomo su lanza dispuesto a cortarme por la mitad. Mire con seriedad al arquitecto.

Mis ojos lo miraban, queriéndole mostrar que en realidad no se comparaba a mi. Lo entendió cuando la lanza no llego a tocarme, solo se detuvo a centímetros de mi cabeza.

-¿Es una especie de prueba?- pregunte seriamente.

-Queria comprobar algo- dijo volviendo a su posición inicial, como si no pasara nada.

-Espero que te haya servido- apunte a la estatua que me había atacado, la apunte como si tuviera una pistola formada con mis dedos- azul- dije desinteresadamente.

La esfera se formó en mis dedos y salió disparada atravesando la estatua con facilidad. Está cayó al suelo destruida.

Me dirigí caminando hacia la puerta y pase sin ningún otro inconveniente. Se cerró detrás de mi y sello para que solo se pueda atravesar usando una llave.

Frunci el ceño por eso. ¿Por qué me había dejado pasar a mi entonces? Tal vez sintió mi aura o sospechaba que iría a ver.

Pase desapercibida entre los cazadores que entraban a la mazmorra. Fui hasta el edificio de mi departamento, allí entre y una de las encargadas ni bien me vio se acercó.