El Rebelde y el Elegido

Quizás Harry tenga razón

Una hora, treinta y seis minutos y dos excusas apresuradas.

Eso fue todo lo que necesitó después de la llegada de Tonks a la Madriguera para que Harry la presionara contra la pared del cobertizo de las escobas, besándose como si sus vidas dependieran de ello. Harry, Ron y Ginny habían llegado el día anterior, pero Tonks pasó el primer día de sus vacaciones con sus padres, para gran decepción de Harry. Sin embargo, ella había aparecido con una noticia que lo deleitaba: los Weasley la invitaron a quedarse durante todas las vacaciones. Debido a que todos los estudiantes fueron enviados a casa durante Navidad por razones de seguridad, Tonks estuvo fuera del trabajo hasta después de Año Nuevo.

"Mmm... Harry... tenemos que parar", murmuró Tonks, tratando de aclarar su mente de la agradable neblina que creaban los besos de Harry.

"No quiero… no voy a hacerlo", murmuró, concentrándose en un punto particular cerca de su clavícula. Ella se rió y se retorció.

"Tal vez quieras escucharla, amigo. Mamá te está buscando", dijo Ron, de pie en la puerta. "Y consigue una habitación".

Harry soltó a Tonks y le lanzó una mirada molesta a su mejor amigo. "Tú eres alguien que habla, besando a Lavender dondequiera que vaya".

"Y ya tenemos una habitación", agregó Tonks. "Así que vete, Won-Won".

"¡Harry! ¿Se lo dijiste?" Se quejó Ron.

"Podría haberlo mencionado."

"Pienso que es lindo." Tonks se rió y luego se volvió hacia Harry. "Pero hablando de contarme cosas, cuéntame lo que insinuaste en tus cartas. Otra lección con Dumbledore y todo eso."

"Y cuéntale sobre el Voto Inquebrantable", instó Ron.

"¿Un voto inquebrantable?" Tonks miró de Ron a Harry, sorprendida. "¿OMS?" Entrelazó sus brazos con Harry y Ron, y caminaron de regreso a la casa mientras Harry comenzaba su historia.

"Espeluznante, pequeño Voldemort", dijo Tonks más tarde en la habitación de Ron. "Dumbledore debería haberlo sabido entonces. ¿Hablaste con él sobre cómo se llamaba, Katie?"

"Sí, pero todo lo que dijo fue que investigaría a cualquiera que pudiera estar involucrado. Para ser honesto, me desconcertó un poco".

Tonks frunció el ceño. "Pensé que Dumbledore al menos te escucharía."

"Sí", dijo Harry vagamente, claramente pensando en otra cosa. "'La armónica siempre fue sólo una armónica.' ¿Qué crees que significa eso?"

Tonks y Ron se miraron y se encogieron de hombros al unísono. "Estoy más interesado en Snape y Malfoy. Quiero decir, un Juramento Inquebrantable... wow... o Snape es el mayor mentiroso de todos los tiempos, o todos nos hemos equivocado completamente con él". Se volvió hacia Harry. "¿Qué piensa Hermione?"

"No se lo he dicho todavía", dijo Harry. "Ella estaba en la cama cuando regresé de la fiesta de Slughorn, y ayer por la mañana nos fuimos tan temprano que no tuve oportunidad."

"Tal vez ella se recupere ahora", dijo Tonks, luego se volvió hacia Ron. "Y hablando de volver en sí, ¿cuándo van a seguir con eso? Solo bésala ya".

"¡Qué! Yo no... estoy con Lavender... ella sólo... no quiero..." farfulló, con las orejas rojas.

"Claro que no, Won-Won." Tonks resopló y puso los ojos en blanco. "Seguro que no."