El Diario de un Hada
Capitulo II
***
-Ya basta, Hilda, dinos qué tienes. Mira, ya el niño está preocupado.
-¡Oye!- Se quejó David al ver que Frida lo señalaba.- Bueno, sí estoy preocupado, ¡pero no soy un niño!...bueno, sí lo soy pero...
Mientras David se ahogaba en sus propias explicaciones me di cuenta de que mis amigos no habían pasado desapercibido mi comportamiento. Era verdad que casi no había hablado en clase y ni comido bien a la hora del almuerzo. El asunto de los "detalles" en el origen familiar me tenían ocupado el cerebro más que nunca.
Siendo sincera, no deseaba comentarles qué era lo que me tenía así por más que entendiera sus buenas intenciones.
Imagina decirles a tus amigos más cercanos que posiblemente el origen de tu familia materna incluye: ladrones de niños para fines diversos (incluye sirvientes, por simple malicia o para criar pareja romántica ¡Dios!), incestuosos, o técnicamente: demonios...y si bien nada se había corroborado, el solo hecho de ser una posibilidad hace que me dé comezón.
-Bien, dinos ya, jovencita. - Dijo Frida con esa voz de mando que tanto le encanta.
Los miré a ambos. Sabía que no me iban a dejar en paz nunca; así que utilice mi último recurso: ganar tiempo.
-Miren, les prometo decirles todo, pero denme un día más. Mañana les comento que es lo que me preocupa, ¿va?
-¿Por qué no ahora?
-Solo, quiero corroborar algo importante, pero luego, lo sabrán todo; ¿Estamos?
-Bien, pero ni un día más. - Dijo David fingiendo coraje.
***
-Kaisa, necesito tu ayuda.
Ella me miró con pereza desde su escritorio y ladeó la cabeza.
-Es raro verte dos días seguidos aquí.
-Si, lo sé, mira, es por el tema de ayer.
-No veo mi libro.
-Si, aun no lo termino. De hecho, quería pedirte un enorme favor.
Es día saliendo de la escuela, me despedí de Frida y David con la excusa de tener deberes en casa, sin embargo, en vez de casa me dirigí a la biblioteca. Mi madre ya me había prometido visitar a la tía Astrid el fin de semana y después de leer algunos puntos en el libro de Kaisa, necesitaba saber si alguien podía ayudarme a definir que era real y que no en lo que había leído. Consideré necesario calmar mis dudas para poder dormir en paz. Quizá el exceso de sombras (ya no solo eran solo dos personas, había visto grupos de tres y de cuatro) y la pesadilla que había tenido, eran algún indicador de dejar todo esto de lado.
-Quisiera ver si puedo hablar con alguna de las tres brujas.
-¿Para preguntarle sobre el origen de las hadas?- dijo mirándome y sonriendo.
Asentí con seriedad.
-Esas brujas son especiales, no es como si pueda irlas a ver así como así y me den una audiencia.
Le miré más intensamente poniendo ojos brillantes.
-Oh no, no, no.-
-Por fi...-
Ella me miró un momento, bufó, sonrió y me jaló las mejillas.
-Eres un bombón. Un bombón chantajista.- luego me revolvió el pelo.
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Diario de un Hada
Mystery / ThrillerHilda tiene dudas acerca del origen de las hadas. Investigar el pasado no siempre puede terminar bien. Los cuentos de hadas son una cosa, la Historia cruda, por otro lado, puede no tener sabor dulce.