7
¿Iba a decirme la razón? Probablemente no, en cambio me había dado una respuesta concisa. No estaba bien. Su mirada se mantenía sobre mi con unas notables ganas de expulsar algo de su boca. Esta vez incontenibles por las líneas al costado de sus ojos que se alargaban ante su disgusto.
—¿Es ese tu novio?— ¿perdón? Pensé retrocediendo la granola que estaba por llevar a mi boca.
—¿Que te hace pensar que te voy a contar mis cosas?— de estas riñas de miradas aún no había un ganador, la contienda se mantenía pareja. Ahora había jugado sus cartas, y su silencio lo había tomado como mi victoria, solo por unos segundos...—Si, ¿sabes que? no me interesa— le di una mordida a mi granola e inesperadamente su enfoque cambio de mis ojos a mis labios por unos segundos ¿Habían sido ideas mías? no lo sé, pero me parecía masoquista de mi parte que en el fondo lo estaba esperando, y una vez aquí no hacía más que lo que había hecho siempre, llevar mi paciencia al nivel 1000.
—No voy a preguntar nada acerca de tu vida, tu haz lo mismo y mantente al margen— dije poniéndome de pie y pasando a su lado para
luego salir por la puerta.El creía tener el derecho de enojarse y jugar con la paz de la gente.
Después de estar unos largos treinta minutos en el despacho de Jonathan, salí de ahí y tomé un puño considerable de pastillas de mentas de el escritorio de Dereck, quien me miro por encima de sus lentes enmarcados de dorado. Al final Sara tenía razón, Dereck era el más sensato de todos.
—¿Está todo bien?— dijo con un timbre en la voz algo divertido. Y yo asentí extrañada.
—Grace, esta mañana escuché tu discusión con Ethan, debes saber que aquí no hay privacidad en ningún lado, ellos también lo saben— mire alrededor para notar como algunos me miraban de reojo.
—Bueno pero ¿no es normal? No le cae bien a nadie— dije tomando una pastilla, mi garganta estaba un poco irritada después de la charla con Jonathan.—Si, eso es un hecho, pero todos lo ignoran, el último chico que trabajaba en conjunto con el salió huyendo, es insoportable y más si le das cuerda a sus cosas— dijo mientras tecleaba algo en su computadora.
—¿No es algo que deba ver recursos humanos? algo así como comportamiento en el entorno laboral— carraspee un poco luego de hablar.
— Recursos humanos no lo echará solo por tener esa cara de palo y no hablar, en teoría no hace "nada"— dijo enfatizando entre comillas lo último.
—Así que Grace, amiga mía, te deseo suerte, piensa que estás en ese reality "El desafio"— dijo mofándose de mi situación.
Regrese a mi puesto de mala gana, sería más llevadero si solo existieran personas como Dereck y Sara y eliminarán a todos los Ethan de las oficinas.
ESTÁS LEYENDO
Reportando Otra Vez ©
RomanceEthan no está del todo dispuesto a darle la bienvenida a Grace, y eso ella lo nota, enfrentándose a la incómoda rivalidad que crece sin límite, o al menos así ella lo pensaba, hasta que se encuentra a si misma cayendo ante aquella personalidad fría...