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Diciembre 29


Ese diciembre veintinueve fue menos doloroso que los días pasados.

Luego de haberme quedado dormida llorando me levante a las 6am y decidí salir a correr; cosa que no hacia desde hace muchísimo tiempo.

Corri cinco millas mientras oía musica y mi mente de distraía.

Solo me enfocaba en la belleza de los arboles, de sentir brisa golpeando mi cara. De respirar aquel aire fresco.

Un suspiro resentido salia de mi boca cada vez que recordaba al chico que ya no era mio pero de forma inmediata hacia lo posible ignorar aquellos recuerdos.

Al llegar a mi casa tome una ducha fría y me concentre en el agua fría acariciando mi cuerpo. El frio erizaba mi piel pero mi cabeza helada se sentía de maravilla.

Al salir me tome una taza de café negro sin azúcar, mis ojos ardía así que aplique una crema para que el ardor no fuese mucho.

y así pase el día, distrayendo mi mente lo que mas pudiera.

Relatos de una persona enamoradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora