No ensucies el agua de los demás

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Recordando momentos donde Damián quería ir a la fiesta de su mejor amigo llamado Arturo, sus compañeros le dijeron "...pensamos que tú serias el único en no ir, con eso de que tú papá es muy enérgico..." pero en esa ocasión no solo saltaron palabras, muchos de los compañeros de Damián iniciaban con burlas, chascarrillos, groserías y ofensas a los compañeros que no irían, si, justamente, el alumno que diga más groserías es el que se siente el más grande; pero no se da cuenta que cada una de las palabras expresadas solo lo ataran más a su limitación en vocabulario y encerrándolo en una mal categoría social "la vulgaridad", si, esta sería una mala categoría porque, las personas que han marcado los "límites sociales" en cuanto al comportamiento humano, con una forma propia de hablar y actuar, no consideran la realidad, que esos "limites sociales" solo son una fantasía, ya que las personas en general dicen, expresan, actúan y comentan más vulgaridades sin que exista una división entre los que asisten a las escuelas mejor posicionadas académicamente y los que nunca asistieron a una escuela para su formación.

Damián es uno de los mejores alumnos en cuanto a calificaciones o conocimientos académicamente hablando, por eso los maestros siempre le pedían su opinión o comentarios sobre las practicas que realizaban, hubo una práctica donde Damián se quedó sin palabras y no supo cómo expresar lo que estaba viviendo.

La Maestra de Ciencias Sociales llamada Elisa, les pidió que llevaran a clase un vaso y un pedazo de trapo o franela, para realizar una práctica del comportamiento humano. Al llegar a la clase la maestra Elisa, les pidió que fueran a los bebederos que estaban a un costado de su salón y llenaran con agua a la mitad su vaso de plástico, todos corrieron y en eso Damián cae al piso al momento de que su compañera Ximena le pusiera el pie, logrando hacerlo tropezar y caer sin poder meter las manos creando un sonido de alto impacto, todos sus compañeros se detuvieron a verlo, solo se reían y burlaban de él diciéndole "si no ves bien cambia tus lentes", "si no sabes mover los pies, no camines", "un burro puede caminar mejor que tú", pero no podía faltar "el lenguaje florido" de los compañeros "te caíste por pendejo", "para pendejo no se estudia, se nace", "tú eres el mejor ejemplo de pendejo, deben poner tu foto en el diccionario" entre muchas otras palabras que solo provocaron que Damián permaneciera en el piso hasta que se alejaran todos para poderse levantar y aun con un poco de dignidad caminar sin demostrar dolor alguno.

Cuando todos los compañeros incluyendo a Damián estaban en el salón de clases, la maestra Elisa les comento... –justamente lo sucedido con su compañero Damián y la forma de actuar de ustedes es lo que aprenderemos hoy-, todos con cara de asombro guardaron silencio y se acomodaron esperando a que la maestra Elisa los regañara; en eso la maestra Elisa pasa con cada alumno y les pone una marca en su vaso hasta donde tenían agua, para indicarles que ellos tendrán que tirar el agua al piso y con el trapo o jerga que llevaron lo tenían que volver a llenar hasta la marca. Inmediatamente los alumnos se apresuraron a vaciar el agua en un espacio del salón, uno a uno fue viendo como el agua que tiraron les costaba trabajo volver a ponerla en el vaso, algunos apretaban mucho el trapo, otros de manera suave y muy poca agua caía en su vaso, algunos no querían ensuciarse la manos y decían comentarios como "maestra solo nos está haciendo trapear el piso", a lo cual la maestra Elisa le dijo "sí, solo trabajando podremos lograr nuestro objetivo", pasaron los minutos y cada uno de los compañeros de Damián comparaban sus vasos y veían quién era el que tenía ya más agua dentro de su vaso, algunos querían ir a tomar el agua de otros compañeros, a lo cual la maestra Elisa les mencionaba -eso que estas intentando hacer Ximena es robo, porque esa agua no te corresponde a ti- ya con cara de "a usted que le importa" Ximena se sienta en su lugar y ya no continua con la actividad demostrando falta de interés y provocando que otros compañeros desistan de seguir las instrucciones de la maestra Elisa, pero Ximena no logró tener eco en sus palabras y acciones, volviendo por ella misma a intentar llenar su vaso.

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