𝐑𝐞𝐞𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐫𝐨 || 𝐊ö𝐧𝐢𝐠 ☆ (Finalizada)

XIII

Estaba haciendo papeles, como siempre. Papeles de salud, papeles, papeles, y papeles. Ya me quedaban unos pocos cuando Sean entra.
Lo miro mientras me da una sonrisita.

- Dame esos papeles y anda con tu noviecito, te está esperando. - Dijo mientras se sentaba en la mesa y agarraba los papeles que me quedaban.

- ¿Eh? Pero...

- Nada de peros, vos anda, después me agradeces.

Asentí y me levanté. Le di una palmada en el hombro y me fui.
¿König me estaba esperando?¿Para qué?
Mientras caminaba pude ver a un chico grandote esperando. König. Lo saludé con un abrazo y un besito. Rápido me contó su idea.

- _____, como estuvimos bastante tiempo separados... Me gustaría pasar este día contigo, juntos. - Dijo mientras miraba para otro lado. Por dentro me estaba muriendo de ternura.

- Ay König... Claro que sí. ¿A dónde quieres ir? - Dije mientras lo tomaba de las manos para que me mire.

- Emm... Estaba pensando en hacer un pequeño picnic en el bosque... ¿Está bien? - Dijo contento y algo avergonzado.

Asentí con una sonrisa. - Mientras estés conmigo, siempre está bien.

Él río y me levanto para abrazarme. Rápido le di un pequeño beso levantando su tela. Luego me soltó y cada cual se fue por su lado. Yo a arreglarme y a preparar alguna mochila para el picnic, König... No sé, supongo que a lo mismo.

Mietras decidía que ponerme llamaba a Sean, tenía que agradecerle por darme tiempo libre y encargarse de esos papeles...

Ya había terminado de ducharme y arreglarme el pelo, me estaba cambiando.
Salí del baño y agarre una de mis mochilas para meterle cosas dentro. Una tela, cargador (no sé para qué), agua, etc.
Luego me fui a la cafetería y pedí algo de comida.
Mientras comía esperaba a König, en cualquier momento ya debería de estar aquí. Mientras miraba mi celular note como alguien se sentó a mi lado. Mire y era él, así que no le dí importancia de botarlo y le dí un piquito.

- ¿Ya estás listo? - Dije mientras agarraba mi mochila y la ponía a mi lado.

- Sí. ¿Tú también? - Mientras me agarraba de los costados y ponía su barbilla en mi cabeza. Asentí.

- ¿Vamos? - Dije mirándolo. Él asintió con una sonrisa, se notaba en sus ojos.

Nos levantamos y salimos de la base. Él prendió su camioneta y comenzamos el viaje.

- No sabía que habían bosques por acá. - Hable mientras miraba por la ventana y luego lo mire, sin su tela. Era tan precioso.

- Bueno, sí, hay uno muy bonito y grande, espero que no nos perdamos jaja. - Con una de sus manos en el volante y la otra en mi muslo.

El camino fue entretenido. Íbamos riendo y charlando un poco.
Cuando llegamos baje y estire mis piernas, habían sido un par de horas sentada. König movió un poco su camioneta hacia donde íbamos a estar y armamos el picnic. Uno lindo a decir verdad. Mantita, comidas, juegos, música, amor...

Las horas pasaron, pero parecian no hacerlo. Me encantaba pasar tiempo con König, con mi chico.
Cuando nos dimos cuenta ya era casi de noche, así que empezamos a guardar todo para irnos.

- ¡König! Amor, necesito ayuda. - Dije de espaldas a él. No contestaba, así que me voltee. - Te digo en serio tont... - Me quedé quieta, mirando a todos lados. No estaba, König no estaba.

¿A dónde fue?¿Me dejó sola?¿Sin avisarme?
Deje lo que estaba haciendo y empeze a llamarlo. Pasaron unos minutos y nada. Agarre mi teléfono y note la hora. Las 9:20 de la noche. Y peor, no había señal.
Estaba entrando en pánico. Me daba miedo el bosque. Más en oscuridad. ¿Y si aparecía un oso?¿Un lobo?.
Rápido prendí la linterna de mi teléfono y empecé a caminar, gritando su nombre.

A la media hora todavía no había encontrado nada, decidí retroceder e ir a algún lugar que tenga señal y llamar por ayuda... König, ¿Dónde estás...?

Pov König.

Notamos la hora que era y comenzamos a guardar todo. Mientras ____ estaba guardando la comida, yo guardaba lo demás. Estaba concentrado en eso hasta que una mariposa paso por mi cara. Era hermosa. La comencé a seguir. La quería. Quería dársela a _____. La tenía que conseguir, era hermosa.
Mientras la seguía no me di cuanta que me había alejado de dónde estábamos, y en un momento perdí al insecto, cayendo en cuenta de que no sabía ni dónde estaba. Era de noche. Estaba solo. Había dejado a _____ sola.
Comencé a mirar a todos lados, no sabía que hacer. Así que comencé a caminar, caminé y caminé. Quería encontrarla. Quería encontrarla y esconderme en sus brazos. Rápido me empezó a faltar el aire. Estaba nervioso, tenía miedo.
Me senté en un árbol y traté de calmarme, tenía que estar bien si quería volver. Pasaron unos minutos y ya estaba mejor. Agarre el celular y mire la hora tanto la señal. Era tarde y no me podía comunicar. Prendí la linterna y seguí caminando. Iba escuchando mis pasos.
¿Qué sería de _____?¿Ya se habría ido?¿Me odiaria por hacerle esto? No lo sé... Espero que no.
Mientras más caminaba más me adentraba al bosque. Cada vez había más cantidad de árboles. De insectos, animales. de vez en cuando escuchaba pasos pesados en algún lugar, eran pasos de animales, quizás osos, no sé...
Cada vez veía menos, lo único que me iluminaba el camino era la linterna. De pronto mi teléfono sonó. Rápido y con emoción lo mire. Batería baja. Mierda.
Empecé a entrar en pánico. Si me quedaba sin batería no iba a poder hacer nada más. Sería mi fin. Mi fin hasta el día siguiente. Mientras estaba en mi cabeza, un sonido me saco de ella. El crujido de las hojas detrás mío. Me di vuelta, no había nada. Decidí quedarme quieto, si seguía caminando quizás me perdía totalmente.
Me senté en las raíces de un gran árbol y descansé mi espalda en él. Estaba cansado. Esto me cansaba más que un tiroteo... Los nervios, el miedo... Era agotador.