La Morte me protège | Kookmin| Omegaverse

Capítulo 34

-Jimin- El omega escuchaba una dulce voz desde lo lejos. No quería seguirla, le gustaba sentir a la oscuridad cubrirlo, como si lo protegiera de todo- Jimin, despierta. 

Aun contra su voluntad, los suaves movimientos en su cuerpo lo obligaron a abrir los ojos.

Gruño molesto, girándose y volviendo a acomodarse para dormir un poco mas. 

-Jimin, tienes que despertar ahora.

-¿Qué quieres de mi he? Si ya me tienen prácticamente secuestrado aquí- Quitó la mano de la rubia de su hombro y volvió a acomodarse. 

-Pense que tenias preguntas- Dijo la rubia esperando llamar la atención del omega.

Y lo logro.

Jimin la observo por unos segundos, tratando de descifrar si las intenciones de la chica eran buenas o malas. 

Sin encontrar nada, suspiro cansado.

No dejando de acariciar en ningún momento su hinchado vientre. 

-¿Me dirás dónde estoy y como llegue aqui?- Astartea asintió con la cabeza y una sonrisa sencilla. 

- Llegamos gracias a un portal, era la manera mas rapida de traerte sin tener que teletransportarnos, eso puede causar algún tipo de traumatismo en un mortal. Y tratar de sacar tu alma seria imposible, tomando en cuenta que la muerte jamás haría eso, tenía que traerte a Gehena lo mas rapido posible. 

-¿Gehena? ¿Que es Gehena? ¿Seguimos en Busan verdad?

Astartea se empezó a reír y se sentó en el borde de la cama. 

-Gehena es mi hogar, estamos en el infierno Jimin. Estamos el noveno círculo, en donde vive Lucifer. Es un sitio precioso para los demonios que vivimos aquí, solo quiero enseñartelo. 

El tono de Astartea era tan fuera de lugar como las palabras que salían de su boca. 

De pronto, lo que la chica había dicho la primera vez que Jimin despertó, retumbaron en la cabeza de Jimin.

<<Taehyung nunca debió morir, el practicamente murio por ti>>

Jimin no tenía nada que decir, no había nada que decir además de que el aceptaría quedarse en el infierno con tal de que su alma gemela vuelva a la vida. 

Incluso, rogaría por que su cachorro tuviera la oportunidad de vivir.

Pero no podía dejar de pensar en su madre, en Yoongi y Hoseok...

¡Mierda! de solo pensar en Jin y en Namjoon y la poca estabilidad mental que ambos tenían, le dolía aún mas el corazón. 

-Se que tienes mucho que procesar en este momento, pero todas esas cosas son de este mundo. Si quieres recuperar el alma de tu hermano, tendras que dejar atrás la vida que conocías.- Astartea le sonrió y extendió sus brazos, como si sus palabras fueran un consuelo para el omega en cinta- Jimin, ¿comprendes que podrías vivir aquí como nunca antes, verdad?

Jimin no tenía respuesta para ello, el realmente no lo entendía.

Astartea creia que le ofrecía un mundo maravilloso, pero al fin y al cabo, el rubio siempre sería un prisionero. Se encontraba aquí, contra su voluntad y para que Lucifer no tomara mas almas con tal de obtener la suya.

Su alma había sido la condenada. Era su alma la que tendría que pagar. 

-Vamos omega, te voy a enseñar la isla, de verdad que es hermosa. Es como un paraíso, al menos para los demonios que lo habitamos. Vamos a caminar alrededor de la playa de lava. También vendrás a cambiarte de ropa para conocer a Lucifer, quiere conocerte y...