04

763 93 9
                                    

1535 , Amasia

La pelirroja callo rendida aún costado del Sultán Süleyman, este también estaba extasiado  y como si volviera a repetir esa noche de hace diez y seis años el la veía encantado . Hurrem solo suspiro aliviada pues no había Sido muy difícil convencer lo de pasar esa noche con el . Los ojos del Sultán brillaban como lo hicieron hace 16 años pero ella solo estaba concentrada en seguir con sus planes y sin medir palabra lo miro y lo volvió a besar .

 Los ojos del Sultán brillaban como lo hicieron hace 16 años pero ella solo estaba concentrada en seguir con sus planes y sin medir palabra lo miro y lo volvió a besar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Y mientras el Sultán era atrapado por los fantasmas de los recuerdos de aquella noche de hace 16 años . La pelirroja se aseguró que no haya dudas de la paternidad de aquel nuevo ser que se gestaba en su vientre.

Y si como nadie jamás lo hubiera previsto , en aquella noche el Sultán Süleyman sentencio el destino de toda su dinastía.

Pues mientras la Sultana Gizem estaba dentro de Hurrem el fue engañado , como mil veces el lo hizo con ella y su amor volátil y fugas que siempre volvía a ella .

Ambos pasaron la noche entera enredado el uno con el otro , mientras Hurrem pensaba en los brazos fuertes de aquel que se había vuelto en su placentero pecado . Y Süleyman soñaba y viajaba a el pasado de aquel amor que alguna vez existió entre ellos . Lo hicieron se quemaron hasta que ni las cenizas quedaron , y la mentira daba su fruto con sabor a Misterio.


.
.

Una noche misteriosa y una
luna mentirosa que te engaño ahora a ti con su luz de pasión.

.
.

Así como llego se fue , pues a la mañana siguiente se despertó sin aquella mujer que había recorrido toda la noche . Aún después de un amanecer frío , seguía deseando  tocar la con sus manos temblorosas y recorrerla con sus besos furtivos . Deseando su piel sobre la suya y sus manos entre lazadas dando le calor uno con el otro . El la anhelaba y la extrañaba tan profundamente. Un sentimiento de perdida lo embargo cuando al abrir sus ojos y no la Vio a su lado , pero que se calmo al ver su silueta en el gran ventanal .

El sultan se acercó luego de ponerle la bata de terciopelo que habían dejado las criadas . Y tocó la cintura de la pelirroja rodeando la con sus brazos , está lo recibió sin exaltarse pues lo había escuchado acercarse . Ambos se miraron y se sonrieron el uno al otro , y bajo la magia del nuevo día el Sultán le dijo .

Vuelve conmigo a Estambul, y ocupa tu lugar a mi lado — Hurrem se tenso y se llenó de desprecio en su interior , aunque su exterior demostrará lo contrario .

no majestad, yo no volveré porque mi lugar es a donde esté Mehmed.

Dice pero el Sultán Süleyman rápidamente la vuelve a besar deseando que sus besos fueran tan efectivos como los suyos , al convencer la . Pero no eran así y Hurrem se separó y mirando lo a los ojos .

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 19 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Te Esperé Donde viven las historias. Descúbrelo ahora