𝘖𝘶𝘳 𝘍𝘢𝘮𝘪𝘭𝘺 𝘐𝘴𝘯'𝘵 𝘕𝘰𝘳𝘮𝘢𝘭 ; 𝘖𝘷𝘦𝘳𝘸𝘢𝘵𝘤𝘩 ༅

٭ 𝗘𝗻𝗰𝘂𝗲𝗻𝘁𝗿𝗼 𝗗𝗶𝘃𝗶𝗻𝗼 ٭

Hecho Por: JP2727

Siempre fue alguien que nunca se conformaba con una chica, siempre era reconocido por ser un "Chico Playboy", su hermano miles de veces se vió en la obligación de salvarlo de algún problema, sin embargo a pesar de las advertencias, el no cambiaba, normalmente prometía y juraba que no lo volvería hacer...

Después del accidente, no sonreía ni un poco, se lamentaba que aquella chica lo hubiera salvado era tan deplorable, su odio por su hermano no dejaba de aumentar. Sin embargo, aquellos ojos, esos bellos ojos azules, que brillaban como estrellas en la noche más oscura, lo incitaban a seguir con su vida, pero su odio era aún mayor.

Su maestro, un jóven omnico, le hizo darse cuenta, comprendió que su cuerpo, por más metal que tuviese, no lo haría un robot o quizá un objeto, su corazón siempre sería un humano.

Aquel desastre que casi acaba con su vida, lo hizo darse cuenta de lo importante que es esta.
Entonces se armó de valor, se acercó a ella, un ángel ante sus ojos, de hermosos cabellos rubios y ojos del color del profundo océano. Sin esperar mucho comenzó ha hablar.
— Ángela, estoy completamente perdido por tí... Eres simplemente brillante, eres como una estrella en el cielo, cada vez que estoy a tu lado es como si mi corazón se acelerara a un millón de millas por segundo, es como estar borracho y viese bailar las estrellas en el cielo. Quizás no soy el de antes, o una persona que realmente merezcas, pero quiero esforzarme en estar contigo y darte lo que realmente mereces.
Por eso, Ángela Ziëgler... ¿Aceptas darme la oportunidad de hacerte feliz siendo mi novia? — Aquellas palabras, ninguna de las chicas con las que había estado antes lo habían hecho sentir como lo hacía aquella bella mujer, temía por primera vez en su vida ser rechazado, quizás se había equivocado, arriesgó su amistad con aquella chica solo por un deseo egoísta, sin embargo, cuando la miró, y vió su sonrisa se dió cuenta que lo había hecho bien, y bueno cuando ella le dijo:  "Ya te habías tardado en pedirmelo, tonto". Supo que esa mujer sería la única con la que quería pasar el resto de su vida.

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En Kanezaka, luego de consultarlo con la amante de los zorros, decidió dar el siguiente paso, su corazón sabía la respuesta, pero su mente dudaba, ya llevaban casi tres años siendo novios.
¿Era suficiente tiempo? ¿Se estaba apresurando demasiado?
Bueno esas preguntas desaparecieron cuando la protectora de Kanezaka, lo golpeó y le gritó que ya iban a ser padres. ¡¿Cómo se iba a negar?!
Y pues tenía razón, además, una chica castaña que no estaba invitada en la conversación, pero si la despreciaba dormía junto a Kitsune en el patio y ese zorro daba miedo, aceptó que estuviese ahí le dio una gran idea, en el Festival del Zorro sería el lugar perfecto.

Luego de que el festival ya estuviese en su clímax, él la guió a una pequeña montaña, un poco alejada, tuvieron una charla, como esas que tienen en cada momento, nunca se cansaba de escuchar a aquel ángel, su ángel, nuevamente acumuló todo su valor, se arrodilló y sacó una pequeña cajita.
— No sé que me deparará el futuro, no sé qué ocurrirá, pero sé que tú me haces sentir tan increíble, contigo mi vida tiene un significado, quiero compartirla contigo, estamos hechos para estar juntos o al menos eso me dice mi corazón. Por eso, Ángela... ¿Quisieras... Quisieras ser mi esposa? — Su sorpresa fue ver a Ángela llorando, pero todas sus preocupaciones se fueron con únicamente dos letras "Sí". Ambos se dieron un beso, uno lleno de amor y esperanza, los fuegos artificiales iluminaron su rostro mientras compartían ese bello momento, era realmente algo "celestial".

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Tres meses después...

Río de Janeiro, Brasil. Un amigo estaba realmente feliz por ese bello momento, por lo que ofreció darles la mejor boda de todos los tiempos, claro, le debía un favor a Hana, por ende terminó aceptando pagar la boda con gusto.
Querían algo temático, no una boda ordinaria, después de pensarlo por mucho tiempo, lo decidieron, una boda basada en la época medieval, ella sería una bella princesa mientras que él sería un valiente caballero.
Ángela se encontraba vistiendo un vestido azul con verde que dejaba sus hombros al descubierto y una pequeña corona.
Genji llevaba un traje gris, y un casco de caballero en su frente.
Sus amigos no se quedaban atrás, desde hadas, duendes hasta bandidas e incluso alquimistas.
El pastel era bastante grande, es decir, en la boda había un gorila, sería injusto que no pudiese disfrutar la fiesta por culpa de un pastel pequeño.
La decoración del lugar estaba repleto de plantas, y pequeñas luciérnagas, música bastante animada y un ambiente bastante lindo, todos se llevaban muy bien. A excepción de Kiriko y Pharah, que se la pasaron compitiendo durante toda la boda, sin embargo eso solo hacía reír a los presentes allí.

Finalmente, llegó el momento de los votos, esas palabras que le dedicas a la persona con la que estás apunto de compartir tu vida, esa que siempre estará a tu lado en lo bueno y en lo malo, simplemente "esa persona".
Genji Shimada comenzó.
— Quizás en el pasado fuí un desastre, dije muchas cosas de las que hoy me arrepiento, pero estar a tu lado, conocerte y haberte pedido matrimonio, además de esperar a un bebé contigo, son cosas de las que nunca en mi vida me arrepentiré, porque Ángela, yo te amo. —
Llegó el turno de la esposa, Ángela Ziëgler.
— Oh Genji, cuando te salvé, quizás lo hice porque sentía que era mi deber como doctora, sin embargo, cuando nos escribíamos cartas y hablábamos por ese medio tan anticuado, o incluso cuando me pediste ser tu novia, me di cuenta de lo importante que te has vuelto para mí. Por eso y por cada cosa que has hecho por mí, quiero decirte gracias y que recuerdes que te amo. —
Unos lloriqueos llamaron la atención de los presentes, es decir era un momento bonito sería normal que alguien llorase, lo que nadie esperaba es que quién lloraba era Hanzo.
Un momento... ¡¿QUÉ?!
HANZO SHIMADA, UN ARQUERO SIN EMOCIONES ¡LLORANDO! Eso tomó desprevenidos a todos, menos a Kiriko, quién por cierto le tomó una foto sin que este se diese cuenta.
— Bien, por el poder que se me ha concedido, yo los declaro marido y mujer, ahora mueve ese cuerpo y besa a la novia ¡YEAH! — Lucio dió la indicación, y finalmente el primer beso como pareja de casados había sido dado, la gente celebraba y gritaba.

Luego de un rato de fiesta, en la que Cassidy terminó borracho, Hana y Kiriko desaparecieron y volvieron un poco despeinadas porque fueron "corriendo por el regalo en el auto" y un gran rato entre el matrimonio llegó el momento de tirar el ramo, este fue lanzado y atrapado de manera totalmente legal por Kiriko, usando su teletransporte.
— ¡EL RAMO ES MÍO PERDEDORES! ¡VEN HANA SEREMOS LAS PRÓXIMAS! — Gritó con alegría mientras todos en el lugar reían y así fue como continuaron con la celebración.

Ponto empezaría su luna de miel, pero eso será para otra ocasión, pues esta historia, finalmente acabó...

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