Tu vida cambio de una forma brusca luego de que tu viejo se muriera, si antes de eso, sufrias, y el era uno de los unicos que te ayudaba a superarlo, ahora sin su presencia en tu triste vida seria mucho mas alla de una tortura.
Un cuestionario te at...
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No fue mucho lo dormiste aquella noche, de seguro apenas fueron un par de horas o menos. Si, de seguro debe ser eso.
No fuiste a buscar comida por dos razones, para no preocupar a Doña Mirta y porque no tenias dinero. Asi que rendida te levantaste en eso de las una de la mañana, harta de no poder consiliar el sueño. Abriste tu notebook y empezaste a mirar videos de como utilizar katana, porque como ya habias reservado un lugar para aquella competencia, debias ir preparada.
No habian videos de como utilizar las respiraciones, pero si sobre el manejo correcto de la katana.
En una semana iba a ser ese combate. Sinceramente debias ganar mas masa muscular, porque por lo palito que sos te lleva el viento puesto.
Estabas decidida de que llevarias mascara para cubrir tu identidad, no querias pasar verguenza si llegabas a perder de la manea mas patetica y si, estabas convencida que perderias, pero valia la pena si llovia alguna que otro billete para comprarte comida.
Asi estubiste hasta las ocho de la mañana. Tu cuerpo tambaleaba mas por el hambre y el sueño que te ganaba.
Hasta que de golpe paraste, ¿de donde sacarias para alimentarte en una semana?
Miraste la heladera, no habia casi nada, solo seguian aquellas manzanas y el pan con quezo cremoso de tu padre.
¿Seria suficiente para aguantar una semana?
No querias molestar ni preocupar a Doña Mirta y no tenias dinero para comprar. Asi que a disminuir raciones de comida sea dicho!
Eso si, si la mujer te invitaba a comer, ni loca le dirias que no. La comida, es comida.
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Por suerte no fue tan dificil entrenar, ya que tu viejo te daba lecciones de combate por horas. Pero eras muy timida, y nunca las pusiste en practica.
De que fueras flaca y estuvieras debil, no significaba que no quedaran fuerzas...
Ahora te acuerdas, la escuela!. Pero te tranquilizas luego, el director te dio tu semana de luto por tu viejo, con la promesa de tu parte que no faltaras mas. Asi que por el estudio, te preocuparias la semana que viene. La semana que viene. Tienes un monton de cosas para la semana que viene.
Aun con esas preocupaciones seguiste entrenando, para luego desayunar una manzana.
Tu dieta ya habia empezado.
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