Dueño de tu inocencia - Jung Hoseok y Tn__-

(2)

Pov JaeKyun:

Llegué a la casa de ese hombre, eran las diez en punto.
Toque el timbre eléctrico y las puertas se abrieron.
Trague saliva nerviosa y me adentre, camine a paso firme, no quería verme nerviosa.

— JaeKyun... — la voz tan profunda de ese hombre me hizo detener mis pasos.

Se encontraba parado al pie de las escaleras, mirándome fijamente.
Trague saliva y baje la mirada nerviosa.

— ven, vamos a mí cuarto — todo en mí cuerpo tembló, pero obedecí.

Fui dónde él y abrió paso para que suba primera, subí las escaleras con más vergüenza de que él esté detrás mío.
Llegamos a la segunda planta y sentí sus manos en mí cintura, di un salto del susto y oí su risa.

— tranquila, relajate JaeKyun — sentí su aliento en mí cuello y luego fueron sus labios trazando besos lentos.

Me obligó a caminar con él pegado a mí cuerpo, hacia una puerta abierta.
Divisé un cuarto y sentí nervios.
Me liberó de su abrazo y tomó mí mano haciéndome ingresar con el, cerró la puerta con seguro y me miró fijamente.

— no me gusta que estés callada, está noche quiero que hables, que grites y sobre todo... — me acorraló entre su cuerpo y la puerta — que te entregues a mi... — susurró roncamente y besó mis labios.

Jadee al sentir sus manos en mis glúteos, me quitó mí bolso de mano que aún tenía y me alzó haciendo que enrede mis piernas en sus caderas.
Automáticamente lleve mis manos a su cabello, me sujete de él y gruñó en mí boca.

— sabes deliciosa... — susurró y caminó hacia la cama, volví a besarlo porque quería más de su boca.
Sabía a algo indescifrable, no era una comida, no era un aroma, tampoco un perfume.
Era un sabor rico y a la vez adictivo.

Mí espalda tocó el suave colchón y sentí su cuerpo sobre el mío sin hacer tanta presión, se acomodó entre mis piernas y bajó su boca a mí cuello.
Succionó mí piel haciéndome gemir suavemente y comenzó a quitarme la ropa.

— JaeKyun esta noche gritaras tan fuerte que todos escucharán mí nombre. — se arrodilló para quitarse su camisa mirándome fijamente y cubrí mis pechos desnudos.

— pe-pero no sé tu nombre. — susurre con vergüenza y sonrió ampliamente.
Se quitó el resto de ropa y cerré mis ojos para no verlo.

— Hoseok... — susurró y sentí su cuerpo ahora desnudo sobre el mio — Jung Hoseok — besó mis labios lentamente y enrede mis manos en su cabello.
Me deje llevar por sus labios, era tan suave y lento.

— es-pera....duele — solté al sentir un dolor fuerte en mí zona íntima.

— aguanta solo un poco — susurró y volvió a besarme, clave mis uñas en sus hombros al sentir el dolor más horrible de toda mí vida, algunas lágrimas escaparon de mis ojos y solloce.

Aparte mí boca de la suya y trate de calmar mí dolor, no quería llorar como una estúpida.

— relajate, ya pasará — susurró y comenzó a besar mí rostro.
Secó mis lágrimas y poco a poco deje de sentir dolor.
Una sensación extraña me invadió, deseaba más.

— muévete por favor — rogué y sonrió ampliamente.
Capturó mis labios nuevamente pero está vez fue más salvaje, comenzó a moverse provocando que grite involuntariamente.

— ahg eres mu-muy estrecha — jadeó y subí mis piernas un poco más, queriendo encontrar más.

— aaaah... Más... — gemi ya sin vergüenza, ¿Que más da? Acaba de quitarme mí virginidad.

— ¿Más que? — susurró yendo más lento y tiré mí cabeza hacia atrás.

— ¡Más rápido! — grite y oí su risa, subió mí pierna más arriba de sus caderas y comenzó a penetrarme fuertemente.

Mis gritos eran incontrolables, sus gemidos tampoco parecía controlarlos, él no paraba de moverse rápidamente mientras yo apretaba fuertemente las sábanas.
Un dolor en mí vientre bajo se hizo presente, él aumentó sus embestidas y besó mis labios profundamente.

— ya casi bebé, dejalo salir — susurró en mí oído y mordió mí cuello.

— ¡Hoseok! — grite sintiendo mí cuerpo explotar.
Caí rendida y él lentamente dejó de moverse, sentí mí intimidad caliente y muy mojada.

— vamos a bañarte y luego dormimos — salió de mí interior y se levantó, cubrí mí cuerpo rápidamente y sentí mis mejillas arder.

— ¿Dormir? Pe-pero debo irme, creí qu-que... — susurre preocupada y él me miró atentamente.

— ¿Piensas irte en medio de la noche? Estás loca — negó con la cabeza y tomó mí mano.

Abrió una puerta y divisé el baño, me hizo entrar primero y luego él.
Algo bajaba entre mis piernas, mire y tenía sangre, era sangre mezclada con un líquido blanco.
Sentí mis mejillas arder y la vergüenza me invadió, él encendió el agua y enjuague mí cuerpo rápidamente.

— tranquila, es normal que sangre, acabo de romper algo en ti — comenzó a acariciar mí cabello y me metió bajo el agua.

Me giró y frunci mí ceño sin entender, se apoyó contra mí trasero y jadee.

— apoya tus manos en la pared — obedecí y me hizo inclinar más mí cuerpo, quedando con el trasero en alto.

— ¿Po-porque...? — susurre y sentí su miembro entre mis piernas.

— aún no termino — susurró y fue entrando en mí vagina poco a poco.
Tiré mí cabeza hacia atrás y cerré mis ojos fuertemente.

— Hoseok... — gemi y me tomó de las caderas, comenzó a penetrarme profundamente, lentamente me torturaba.
Sus testículos chocaban contra mis pliegues vaginales.

Aumentó sus movimientos y mis gritos también, se sentía demasiado rico.

— ¡Ma-mas rápido, Hoseok! — grite apretando mis manos contra la pared y aumentó su ritmo.

El ruido de agua y los choques corporales me excitaban más, una vez más sentí ese hormigueo en mí vientre bajo y él comenzó a disminuir la velocidad.

— mierda... — gruñó y mí vagina comenzó a chorrear líquidos.

Todo mí cuerpo temblaba, salió de mí interior y lave mí cuerpo, me dolía el caminar, fingí que podía y salimos de la ducha.
El secó mí cuerpo dejando besos húmedos por cada parte, al terminar se secó él y salimos del baño.

— descansa — lo mire y vi como salia del cuarto con una toalla amarrada a su cintura.

Me dirigi a la cama y me senté con cuidado, me dolía mucho mí zona íntima.
Me acosté y me cubrí para poder dormir.

Me sentía realmente agotada pero valía la pena, era solo está noche y podré seguir mí vida con Jae Beom, como siempre.