3. Kyubi

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Un charco de sangre se formaba dentro de un bosque, el Shinobi estaba expectante ante lo que sucedía ya que no podía creer que de un segundo a otro su brazo fuese separado de él en un abrir y cerrar de ojos. Naruto no sabía lo que pasaba y no quería saber tras ser testigo de aquel silencio.

¡AHHHHH! ¡MI BRAZO!– pero sus gritos fueron silenciados por una patada que le propinaron en su costado.

Naruto aprovechó que dejó de sentir un peso sobre él para poder levantarse y correr de esa zona ignorando el kunai que se había zafado de su pierna, incluso, ignoró el hecho de que su herida se cerró en cuestión de segundos.

El charro iba a seguir al niño pero varios shuriken evitaron que avanzara de su lugar.

–¡Tayuya!– Ramiro llamó a su hermana que viajaba de entre los árboles.

+¡Voy!+ la pelirroja saltó de entre los árboles siguiendo el paso del rubio.

¡Katon: jutsu de la llama!– una masa de fuego se adhirió al cuerpo del charro y eso formó una sonrisa confiada en el Shinobi, sin embargo, se le hizo extraño que no haya gritos de agonía.

Su cuerpo se petrifico al observar como las llamas eran absorbidas por algo, no, Ramiro aspiraba el fuego por su boca como una aspiradora.

Ramiro expulsó el fuego de su boca para regresarlo al ninja que anonadado recibió el ataque, y una explosión de fuego se dió en su posición dejando al ninja herido como chicharrón.

–Será mejor que me vaya si no quiero que esos ANBU me encuentren– una vez dicho eso, su cuerpo pasó a un estado sombrío con flamas que se adentraron al suelo viajando al mundo de las sombras.

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Mientras Naruto corría por su vida del ninja que se quedó atrás enfrentándose con aquel tipo, Tayuya lo seguía desde los árboles.

+🎵¡Where you go I go, what you see I see! A no, esta no es la situación+ por distraída se resbaló de una rama, y con un grito agudo cayó encima de Naruto otra vez.

Naruto solo lanzó un quejido por la persona que cayó encima de él otra vez.

–¡Quitate!– ordenó su liberación porque no podía levantarse.

+Cállate, me pidieron echarte un ojo y lo voy a hacer+ Tayuya no se quitó de encima de él y lo abrazo aunque este intentaba liberarse.

–¿Como es eso de echarme un ojo? ¿¡Te lo vas a quitar!?– preguntó alterado.

+Significa que te voy a vigilar, tarado+

Pasaron pocos minutos y de poquito en poquito Naruto se iba calmando, dejó de moverse como pescado buscando libertad y Tayuya lo soltó, aunque, el rubio estaba desconfiado por aquella niña delante suyo.

–¿Que quieres?– preguntó en seco, más seco que el pollo relleno que dan en eventos como en las bodas o XV años.

+Que amabilidad, Imbécil. Y solo venimos para ayudarte, además, mi nombre es Rivera Tayuya+ lo que dijo causó extrañeza a Naruto.

–Soy Uzumaki Naruto, y ¿a que te refieres con “venimos”?– puede tener cara de bobo pero de repente suele pensar en las palabras del otro, aunque, se ve enojado por algo.

+Vengo con mi hermano que se quedó atrás, y... ¿Donde esta Ajax? Quiero hacer pollo asado+ Naruto no entendía porque hablaba sola.

–¿Que?–

+No es nada, imbécil. Llevame a tu casa que tengo un vergazo de sueño+ Tayuya caminó un poco pero al pisar cerca de un árbol activó una trampa de cuerdas que atrapó su pie y la alzó hacia un árbol dejando a la pelirroja de cabeza. +¡Oye, ayudame!+

Naruto: el Inicio. Conflicto De Los Konoha ShinobiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora