¿niños? capítulo 2

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Lunes 12 de febrero/12:00 a.m.

Ha pasado una semana desde lo acontecido en la enfermería y Deuteros está bastante feliz de no haber tenido otro inconveniente igual.

Sentado en su escritorio disfruta de su almuerzo, prefiere comer en su oficina (enfermería) que con su compañeros en el comedor del personal educativo; puede sacarse su mascarilla con facilidad, esta lejos de la gente y de sus ferómonas ¿Que más puede pedir? Claro, además de un aumento de la riquísima Moussaka. Mientras termina de comer su almuerzo, recuerda los informes que tiene que entregar hoy a dirección, solo eran los historiales de todos lo alumnos, no era nada complicado, de no ser por dos estudiantes que no cumplen con la documentación completa. Trato de comunicarse con los padres pero fue inútil, lo único que llegó a su manos fue el certificado de nacimiento y solo con ese documento no podía abrir un historial. Esto era un dolor de cabeza.

Termino la hora del almuerzo y Deuteros ya estaba listo para la entrega de sus documentos. Relajado tocó la puerta de la oficina del director, después de una respuesta: "Adelante" ingreso con sumo cuidado.

- Buenas tardes Director Sage...

- Deuteros... Buenas tardes- Sonrió.

- Vengo a dar el informe de mi trabajo, espero haya revisado el documento que le mande.

- Si lo hice, tu trabajo es impecable... pero hay dos casos que me llaman la atención.

- A mi también señor, solo me dieron el certificado de nacimiento, pero usted sabe que con eso no es suficiente para un historial médico. Sugiero mandar al tabajador social a investigar este caso.

- Ah...- Suspiro cansado- Tienes razón, lamentablemente tiene permiso por su celo y no podrá hacerlo. El sistema cierra en tres días y será un problema si no llenamos sus historiales.

- Es una lástima... Bueno señor Director con su permiso me retiro, llámeme cuando necesite de mi presencia- con paso firme se dio la vuelta.

- Espera un momento joven Deuteros ¿Sera posible que usted pueda investigar el caso?

- ¡¿Que?!- Gritó exaltado y rápidamente se dió la vuelta- Pe-pero... ese no es mi trabajo ¿No lo puede hacer su maestro o alguien más?

- El maestro encargado también tiene permiso por su periodo de celo, el único que puede hacer una investigación sin que nos llame la defensoria del menor sería usted. Por favor joven Deuteros, si no llenamos su historial usted tendrá que llevar el caso al Centro del Menores.

- ¡¿Ah?!

Deuteros se quedo en blanco, no quería ir al Centro de Menores eso solo le traería problemas y era lo que menos quería en estos momentos. No tenía más opción aceptar, el Director Sage fue muy amable con el al darle trabajo y no podía darle la espalda en momentos como este.

Pasó 30 minutos recibiendo indicaciones de parte del Director. Su principal objetivo era hablar con los padres (Que jamas fueron a la escuela) para obtener los datos necesarios, no era tan complicado pero para nuestro protagonista era un reto difícil de cumplir. Al salir de la oficina del Director se dirigió hacia su consultorio, aun tenía que llenar algunos papeles, su trabajo era muy agotador.

Llegó la hora de la salida y Deuteros ya estaba preparado para su misión. No sabía mucho de los niños a los que tenia que ayudar pero sabía lo básico, sus aspectos y sus nombres. Estuvo horas buscando a los "niños problemáticos" sin éxito alguno, después de todo casí todos los niños se habían retirado y los pocos que quedaban no eran los buscados. Deuteros estaba apunto de rendirse eh irse a su casa, pensó que tal vez no habían venido, pero estaba equivocado, a pocos metros de el vío a los niños salir del jardín de juegos, los reconoció al instante y no dudo en acercarse un poco hacia ellos. La primera impresión que tuvo de los niños fueron sus ropas, estaban sucias y rotas, parecían un trapo con mangas y ni hablar de sus cabellos que estaban igual o peor que sus vestimentas. Los niños siguieron su camino hacia la salida de la escuela, donde burlaron la seguridad para poder salir, se dirigieron hacia la parada de buses y fue en es instante donde Deuteros perdió su rastro, los niños se subieron y el ya no pudo seguirlos.

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