𝑈𝑛𝑎 𝑙𝑖𝑛𝑑𝑎 𝑐𝑜𝑛 𝑢𝑛 𝑠𝑎𝑙𝑎𝑚𝑒

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Delfina.

—No, pelotudo. No quiero ir,no jodas—cochi me quería llevar a no sé dónde.

—No te estoy preguntando, pendeja. Dale,te espero afuera,sino salís en 5 minutos te vengo a buscar de los pelos.

Croto de mierda,falopero del orto,se hace el gallito,cagón de mierda. Aborto fallido.

Espero 5 minutos para hacer drama y salgo,cochi me estaba esperando en el auto con la novia.

Entro al auto,y estaba Anabella ella me saluda con una sonrisa. Está me cae bien,es muy copada y le tengo cariño.

—Vamos a ir a buscar a Danilo a Liniers.

—Para eso me jodias? Sos joda?

—Es copado el pibe,no sé porqué te cae mal.

—Es alto gato,no me lo banco.

—Es lindo,del—dice Ana con burla.

—Si,nunca dije que no lo era.

—Que se yo,pero es un pibe de tu edad. Y está solo,su hermano esta perdido en la falopa.

Y si,es verdad,pero que mierda me importa a mí? Problema suyo.

—Problema suyo.

—Pendeja atrevida—me dice cochi y me mira mal.

—Me cae mal,corta. Se hace el lindo y es re gato.

—Y déjalo,es un wachin recién. Que haga lo que quiera.

—Que se yo,pero no me lo banco.

—Dejate de joder,es un pibe de tu edad,deja de hacerte la boluda. Vos al menos tenés un hermano que se hace cargo de vos,Sebastian está re perdido,le importa la droga y nada más. Vos sabés lo que es eso para un pibe de 15 años?

—No—susurro.

Él me mira por el espejo retrovisor.

—Qué? No te escuché.

—No,no sé que se siente. No sé que es lo que pasa Danilo.

—Entonces no digas pavadas, pelotuda.

—Bueno,ya está. No le hables así,boludo—lo reta Anna.

Yo miro la ventana, siempre lo mismo. Este pelotudo lo defendía a muerte a Danilo. Siempre,lo prefiere mil veces a él. Entre faloperos se llevan.

Igual creo que Danilo nunca probó,y espero que sea así.

—Voy a dormir, avísame cuando falta poco.

—Dormí,bola—me dice ella y me sonríe.

Le sonrió de vuelta,me acomodo bien y me acomodo bien. Cierro los ojos y antes de quedarme dormida escucho a mi hermano decir.

—Es una pelotuda está pendeja,me da una bronca que sea así.

Que se vaya a cagar.

(...)

Estaba durmiendo cuando siento una cachetada en la cara.

Abro los ojos y veo al autista de Danilo.

Esté me sonríe,que sonrisa más linda. Ahre.

—Buenos días,crota—dice con sarcasmo.

—Que onda,feo—bostezo.

—Hoy me pelee con uno,alto garca. Su viejo habrá pagado para que su hijito juegue.

—Y bueno,déjalo. Total, él tiene que pagar para que lo metan a jugar. Vos al contrario jugas porque sos alto jugador, pelotudo.

Él me sonríe—Esaa,es la primera vez que me hablas sin putear.