𝑈𝑛𝑎 𝑙𝑖𝑛𝑑𝑎 𝑐𝑜𝑛 𝑢𝑛 𝑠𝑎𝑙𝑎𝑚𝑒

3

DELFINA.

—Son re giles,se fueron. Y mi mamá me cago a pedo.

Con Dani nos reímos.

—Y bueno, wacho. Te dijimos que nos teníamos que ir.

Él nos mira mal,pero no dice nada.

Estábamos yendo a una plaza para ir a boludear.

—Y cómo terminó el cumpleaños?—pregunta Dani.

—Bien....Va,se agarraron ahí entre ellos.

—Siempre me voy en la mejor parte,la próxima me quedo.

—No,Danilo. Por algo te dije que te vayas antes,tarado.

Carlos se ríe—Ahora lo cuidas.

Otro más, tengo que disimular. Porque si sigo así,se van a dar cuenta que me gusta este tarado.

—No,es un amigo. Lo cuido como te cuido a vos.

Ellos no dicen más nada,llegamos a la plaza y nos pusimos a jugar a la pelota con una botella de plástico.

—Uru,comiste hoy?—le pregunto cuando ya me siento en el pasto,me cansé.

—Na,mi hermano me tenía que dejar plata. Pero no me dejó nada.

Ese pelado botón, pelotudo de mierda. Hay que recordarle que tiene un hermano?

—Si querés podes ir a comprar algo para comer,que se yo. Yo tengo plata.

Danilo se me acerca corriendo—Dale,me das para un pebete?

Hijo de puta,me lo dijo con una sonrisa que me hace dar algo en el estómago.

—Si,toma.

Le doy la plata que me dió cochi para que me compre algo para que coma yo. Pero no importa.

—Gracias,ciruja.

Yo le sonrió,y levanto la mano para que choque los cinco.

Pero él me agarra la mano y me da un pequeño beso en el dorso de la mano.

—Ay,los que no se tienen ganas.

—Basta, Carlito. Vos anda a comprar—le digo Dani.

Danilo me sonreí,y se va corriendo al almacén.

Carlos se acerca a mí,y se sienta a mi lado.

—Te gusta.

No es una pregunta,era una afirmación.

—Si,y me da bronca que me guste.

—Por qué? Es buen pibe.

—Si,pero ahora. Mira si en unos meses prueba eso, igual me prometió nunca probar eso. Pero no sé. Aparte,es un gato.

—Tranquila, él no se va a meter en eso. Es pillo, sabe lo que hace. Y lo de gato,bueno... No sé.

Miro a Carlos y lo empujó un poco, él tenía razón,Dani sabe lo que hace.

—Deja de cubrirlo,feo—él mismo sabía que era alto gato.

Él se ríe,nos quedamos hablando de boludeces. Hasta que llegó Danilo,con un pebete y un jugo. Y unos 5 caramelos.

—Me alcanzo esto,quieren?

Con Carlos negamos,los dos queríamos que él coma.

—Boe,tanta cara de hambre tengo?

—Na,pero yo no tengo hambre. Y Carlos tampoco.

Él nos mira unos segundos,y después se sienta a mi lado para empezar a comer.